jueves, 26 de junio de 2014

¿Mensajes entre Washington, Montevideo y La Habana?



¿A QUIÉN ESPERAMOS LOS CUBANOS?

Por Iroel Sánchez


Un amigo mío está muy entusiasmado con la más reciente noticia procedente de Estados Unidos sobre Cuba. “En cualquier momento las televisiones de Cuba y EEUU interrumpen su programación y anuncian que el Air Force One aterrizó en La Habana con el Vicepresidente Joe Biden a bordo para iniciar conversaciones con el gobierno cubano”, me dice provocándome una gran carcajada.

Obviamente, mi amigo no se refería a la inclusión de Cuba en otra de las listas que utiliza el Departamento de Estado para justificar su política de asedio contra la Isla. La última de estas evaluaciones está dedicada a la trata de personas que, como también ocurrió con la de estados patrocinadores del terrorismo, da más argumentos para felicitar a Cuba que para condenarla, pero Washington se esfuerza en hacer el ridículo en un tema en el que el país del Norte es líder negativo del planeta.

No caben dudas de que si EEUU hiciera una lista acusando a otros gobiernos de tratar con extraterrestres, también allí estaría Cuba aunque esta no tenga bases aeroespaciales ni satélites propios.

Pero volvamos a mi amigo. Él basaba su entusiasmo en las muy difundidas declaraciones del portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, Patrick Ventrell, quien confirmó y trató de dar otro contenido a lo que poco antes había dicho el semanario uruguayo Búsqueda, según el cual, en la cumbre del Grupo de los 77 más China, efectuada en Bolivia la pasada semana, el presidente de Uruguay, José Mujica, habría entregado “un mensaje conciliador” de Barack Obama al presidente cubano Raúl Castro.

Ventrell declaró que Obama pidió a Mujica “que use su considerable credibilidad como líder regional para impulsar reformas políticas y económicas en Cuba, notando que esas medidas serían muy bien recibidas por EEUU y otros integrantes de la comunidad internacional”. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional agregó que el “contratista” de la Agencia de Estados Unidos para la Ayuda al Desarrollo (USAID), preso en la Isla por delitos contra la seguridad del Estado cubano, Alan Gross, “representa un obstáculo significativo para una más constructiva relación bilateral, y obtener su liberación permanece [como] una prioridad”.

A juzgar por las declaraciones de Ventrell, el gobierno de Estados Unidos ve en Mujica un procónsul para presionar a Cuba sin modificar un ápice su política injerencista. Es todo lo contrario de lo que afirmó el presidente uruguayo al terminar su reunión con Obama el pasado 12 de mayo: “yo defiendo todos los intereses de la barra a la cual pertenezco”. Como parte de esa barra, Mujica jamás ha mencionado el nombre de Gross, pero sí reveló entonces que en su encuentro con Obama trató la situación de los tres cubanos que permanecen en cárceles estadounidenses por monitorear las actividades terroristas que grupos extremistas radicados en Miami organizan contra Cuba, y declaró: “[Obama] no me pide [nada], porque él tiene la inteligencia de no pedir lo que no le van a dar”.

“Habrá que trabajar mucho. Creo que este gobierno es el más maduro para mejorar las relaciones con Cuba. Pero hasta aquí llega lo que le puedo decir”, fue otra de las afirmaciones que hizo Mujica al salir de la Casa Blanca.

La publicación uruguaya dijo -citando fuentes oficiales de ese país- que el presidente Mujica habría transmitido en la Cumbre del Grupo de los 77 la disposición estadounidense a “un acuerdo” con Cuba para, entre otros asuntos, levantar el bloqueo que Washington impone a la Isla desde hace más de medio siglo. Asombrosamente, el semanario de Montevideo dio como revelación -y la prensa internacional lo replicó- algo que está en todos los pronunciamientos de los principales dirigentes cubanos sobre el tema desde 1959: el gobierno de Cuba es “favorable” a la distensión entre La Habana y Washington, con la “condición” de que no haya “imposiciones” del gobierno estadounidense.

En cuanto a lo dicho por Ventrell, no es creíble que el gobierno uruguayo haya considerado “conciliador” un mensaje injerencista y una misión servil a Washington como la que quieren atribuirle las declaraciones del portavoz del consejo de Seguridad Nacional. .

Si se hace un recuento de lo sucedido entre Cuba y Estados Unidos en lo que va de año se aprecia cómo las circunstancias han ido madurando al gobierno de Barack Obama para un cambio en su política hacia la Isla, al extremo que de tan maduro se cae ahora de la mata con las declaraciones de Ventrell, reiterando lo que Obama lleva repitiendo desde que llegó a la presidencia. Repasemos cómo ha sido percibida, en el primer semestre de 2014, la política hacia Cuba en EEUU, además de por “otros integrantes de la comunidad internacional”:

·        La Cumbre de la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe (CELAC), celebrada en La Habana, condenó de manera unánime el bloqueo,
·        La Unión Europea propone a Cuba iniciar conversaciones con vistas a un Acuerdo de Diálogo Político y de Cooperación, dejando atrás la llamada Posición Común, impuesta por Washington en tiempos de José María Aznar.
·        Una encuesta de Atlantic Council, una prominente institución de investigación de Washington, arrojó que 56% de los estadounidenses favorecen el cambio de la política hacia Cuba, mayoría que sube a 63 por ciento entre los adultos de la Florida y a 62 por ciento nacionalmente entre los latinos. Aunque el apoyo es más fuerte entre demócratas e independientes, la encuesta arrojó que 52 por ciento de los republicanos también favorecen la normalización de las relaciones.
·        La agencia de noticias Associated Press (AP), la más importante de Estados Unidos, provocó un escándalo al publicar una investigación sobre un programa conocido como ZunZuneo financiado por la USAID. ZunZuneo -también conocido como “Twitter cubano”- creó una red de usuarios en Cuba a través de telefonía móvil con el objetivo de provocar una situación como las llamadas “primaveras árabes” en la Isla.
·        Tras las revelaciones sobre ZunZuneo, salieron a la luz otros programas similares contra Cuba como Piramideo y Commotion -revelado por The New York Times- que la USAID ensayó en Túnez, y la revista Newsweek divulgó el intento de utilizar a la comunidad masónica cubana en la estrategia estadounidense de “cambio de régimen”.
·        Al saber de las operaciones de la USAID y su continuación con posterioridad a su detención, Alan Gross se declaró en huelga de hambre varios días y tanto él como su esposa urgieron al Presidente Obama a iniciar negociaciones con el gobierno cubano para su liberación, algo que retomaron cuatro congresistas estadounidenses de visita en Cuba a inicios de mayo. El gobierno cubano ha declarado reiteradamente su disposición a un acuerdo humanitario que permita la liberación de Gross y dé solución al caso de los tres prisioneros cubanos en EEUU
·        La captura el 26 de abril por autoridades cubanas de cuatro enviados desde Miami para ejecutar acciones terroristas en Cuba demostró que las actividades que realizaban los tres cubanos aún prisioneros en Estados Unidos están plenamente justificadas.
·        El candidato a gobernador de la Florida, Charlie Christ, anunció que se opone al bloqueo y que viajará a La Habana.
·       Visitó La Habana el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, Thomas Donahue, y declaró que es hora de cambiar la política de su país hacia Cuba.
·        Cuarenta personalidades de la política y la economía de Estados Unidos enviaron una carta a Barack Obama donde piden un cambio en la política hacia Cuba para lograr los mismos objetivos por otra vía.
·        El acuerdo del gobierno de Estados Unidos con el Talibán para liberar un soldado estadounidense a cambio de cinco sospechosos de terrorismo encarcelados en el campo de torturas que gestiona Washington en la base naval de Guantánamo volvió a desatar el reclamo de un canje de los tres antiterroristas cubanos por el “contratista” de la USAID condenado en Cuba.
·        La exSecretaria de Estado Hillary Clinton reveló en sus memorias que recomendó a Obama eliminar el bloqueo.
·        Una nueva encuesta de la Universidad Internacional de la Florida volvió a señalar que la mayoría de los cubanos en Miami desea la normalización de las relaciones con Cuba.
·        La Asamblea General de la OEA, efectuada en Asunción, Paraguay, escenifica una verdadera rebelión contra EEUU. La mayoría de los países se declararon a favor de la presencia de Cuba en la próxima Cumbre de las Américas y una buena parte asegura que no asistirá si la nación caribeña vuelve a ser excluida.

Después de conocer todo esto y sabiendo que José Mujica no es un procónsul de EEUU sino un amigo de la Revolución cubana, no hay que ser muy agudo para percatarse de que el señor Ventrell ha salido a controlar daños y calmar a la gradería ante la repercusión de lo publicado en Uruguay.

Es obvio que hubo algo que no se ha hecho público de la reunión del 12 de mayo porque el presidente uruguayo dijo entonces: “hasta aquí llega lo que le puedo decir”. Sin embargo, no hay que tener mucho sentido crítico ni ser un experto en política para saber que si Obama envió un mensaje al presidente cubano, Mujica no va a tardar un mes y medio en transmitirlo, existiendo líneas aéreas, mensajes cifrados y embajadas en Montevideo y La Habana. A pesar de ello, cualquier cosa parece estar más cerca de la lógica que lo afirmado por Mr. Ventrell al repetir como un loro lo que llevamos escuchando hace más de cinco décadas.

Lo interesante de todo esto es la confirmación de que el gobierno estadounidense sólo modificará su política hacia Cuba bajo una enorme presión, tanto interna como internacional. Obama sigue más preocupado por no molestar a los políticos extremistas de Miami que por escuchar a América Latina, a la mayoría de los cubanoamericanos, a los aliados de Estados Unidos en Europa y a sectores influyentes de su propia opinión pública.

Mientras, en La Habana no esperamos a Biden pero sí a los tres héroes antiterroristas que quedan presos en Estados Unidos y por los que Mujica intercedió ante Obama. Lejos de hacernos ilusiones, es el momento de redoblar la lucha.


LA PUPILA INSOMNE     
23 de junio de 2014      



martes, 24 de junio de 2014

EL CLUB DE BILDERBERG Y EL PROBLEMA DE UCRANIA

Por Boris Novoseltsev

La 62ª reunión del Club de Bilderberg, una de las estructuras más cerradas de la gobernanza global y que los periodistas le han achacado el epíteto de la camarilla global, se llevó a cabo en la ciudad de Copenhague, Dinamarca entre el 31 de mayo y el 1º de junio del corriente.

En un informe de prensa, la organización declaró que la agenda cubriría una amplia gama de cuestiones tales como el futuro de la democracia y de la clase media, la nueva arquitectura internacional del Medio Oriente y el futuro de Europa. Esta redacción vaga y ambigua ocultó problemas específicos que también fueron objeto de discusión. Estos incluyeron las perspectivas del programa nuclear iraní, particularmente dado el acercamiento entre Rusia, China e Irán y el alza en los movimientos nacionalistas en Europa, lo cual aumenta el peligro de su desintegración; el acuerdo gasífero entre Rusia y China; la futura legislación de la Unión Europea sobre la privacidad en Internet; las guerras cibernéticas y su influencia sobre la libertad en Internet y el cambio climático.

Dos puntos fueron centrales: la situación en Ucrania y la política exterior de Barack Obama, considerada por los círculos influyentes del establecimiento global, como ineficiente.

El tono de estas discusiones fue impuesto por el reciente acuerdo gasífero de largo alcance entre Rusia y China. Según observadores occidentales, el acuerdo le ha permitido a Rusia fortalecer significativamente su posición en el mundo en general y en Ucrania en particular. La asociación gasífera entre Rusia y China le quita a Kiev su último argumento: el control del gasoducto que une a Rusia con sus socios europeos. Al mismo tiempo, la alianza estratégica entre China y Rusia ha sido un largo dolor de cabeza para Occidente, que ha hecho todo lo posible para impedir el acercamiento entre los dos países.

Uno de los participantes en la reunión del Bilderberg en Copenhague confirmó que Ucrania fue uno de los primeros problemas en discutirse durante la reunión del 31 de mayo a la mañana. No se sabe con exactitud quiénes participaron en la reunión, pero se puede sacar ciertas conclusiones considerando la lista de las personas invitadas.

Indudablemente pareciera que la reunión entre los participantes giró sobre la actual estrategia de Estados Unidos que es considerada ineficiente pero que todos no estaban muy seguros acerca de cómo debería cambiar. Estuvieron particularmente dudosos acerca del grado en que sería necesario que Occidente redujera el nivel de tensión en sus relaciones con Moscú respecto al problema ucraniano.

Se presume que el Secretario General de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen y el general de cuatro estrellas norteamericano, Philip Breedlove, Comandante de las fuerzas de la OTAN en Europa, también participaron en la discusión sobre Ucrania en la reunión del Bilderberg. Varios días antes de esta reunión, luego del encuentro de los jefes del estado mayor de la OTAN, el mismo Breedlove anunció que la alianza no tenía planeado un cambio en el formato de sus relaciones con Rusia en relación con los problemas de seguridad global a consecuencia de la crisis de Ucrania, especialmente con relación a Afganistán. (Aparentemente, no se le ocurrió al general norteamericano discutir si a Rusia le gustaría mantener el formato de sus propias relaciones con la OTAN en respuesta a sus diferencias respecto de Ucrania). La posición de Rasmussen es menos clara, pero en recientes declaraciones públicas no ha planteado que la confrontación con Rusia sea intensificada.

El director del Programa Rusia y Eurasia del Centro Carnegie, Eugene Rumer, quien anteriormente había llamado la atención sobre el hecho de que el problema en Ucrania está lejos del factor ruso sino en el vacío de seguridad creado por las acciones del régimen de Kiev, luego de los acontecimientos de Maidan, estaba presente en la discusión sobre Ucrania. Además, Rumer cree que los intentos de Kiev por conseguir ayuda militar directa de Estados Unidos en forma de armamentos, por ejemplo,son contraproducentes, ya que Ucrania misma es el noveno productor exportador de armamentos en el mundo y su problema no es la falta de armamento sino la abundancia de éste.

Resulta revelador que casi no hubiera representantes invitados de la Unión Europea para tratar lo de Ucrania en la reunión de Copenhague (con la excepción del Ministro de Relaciones Exteriores de Suecia, Carl Bildt). Según observadores, los europeos dentro de la élite global están siendo gradualmente apartados en la resolución del problema de Ucrania.

En general, fue imposible que los temores de los grandes industriales y hombres de negocios, quienes tradicionalmente conforman una proporción significativa de los invitados a las reuniones de Bilderberg, no surgieran durante las discusiones en Copenhague, ya que las sanciones iniciadas por el gobierno de Obama contra Rusia están desatando un caos en sus negocios sin que aporten ningún beneficio tangible para ellos.

Por otra parte, los críticos del gobierno de Obama creen que debido a sus acciones en relación con la cuestión de Ucrania, han creado las condiciones para que Pekín y Moscú inicien exitosamente la construcción de relaciones estratégicas de largo plazo que Occidente no puede ver de ninguna manera como no sea una amenaza contra el sistema global de gobernanza (de ahí que la contención del desarrollo de una asociación entre China y Rusia sea prioritaria una vez más).

Luego de la reunión del grupo de Bilderberg, pareciera que la presión sobre el gobierno de Obama está creciendo en Occidente simultáneamente desde dos puntos: de parte de aquellos que les gustaría que la Casa Blanca redujera la agresividad en la retórica hacia Rusia y de aquellos que son agudamente críticos del presidente norteamericano por su falta de decisión y determinación respecto de Ucrania y que creen que Ucrania debe ser conservada como un territorio para combatir a Rusia en años venideros.

Dificultoso resulta señalar cuál será el balance final de estas fuerzas, pero resulta bastante obvio que la insatisfacción con Washington ha crecido en Occidente desde la anterior reunión del grupo Bilderberg. Esta insatisfacción es compartida por líderes europeos, corporaciones transnacionales e incluso por parte de las élites del gobierno norteamericano. La ironía de la situación revelada por la crisis ucraniana es que existe el riesgo de que la política exterior de Washington utilizada para intimidar a Rusia, se está haciendo realidad aunque de otra forma, contra los mismos Estados Unidos.

Resulta improbable que el resultado de las discusiones de Bilderberg se manifieste el día de mañana, pero comenzará a sentirse durante el otoño y en todas las áreas importantes de la política mundial china, rusa y ucraniana.


APORREA                          

19 de junio de 2014. VENEZUELA




lunes, 16 de junio de 2014

Discurso pronunciado por el General de Ejército Raúl Castro Ruz, Presidente de los Consejos de Estados y de Ministros, en el acto de masas, en ocasión de la Cumbre del Grupo de los 77 más China



Tengo el privilegio de conocer el corazón de Suramérica, la nación fundada por el Libertador Simón Bolívar, a quien debe su nombre...
Querido compañero Evo:
Estimados Presidentes:
Hermanos bolivianos:
Tengo el privilegio de conocer el corazón de Suramérica, la nación fundada por el Libertador Simón Bolívar, a quien debe su nombre.
Hace tiempo le debíamos esta visita a Bolivia. Los cubanos admiramos la centenaria historia de luchas del pueblo boliviano, por vivir bien, en armonía con la Madre Tierra, la Pachamama.
Nosotros conocemos la justa rebeldía de los bolivianos, que nunca se sometieron a los invasores, ni se resignaron a que vaciaran sus montañas de tanto extraerles los minerales, como hicieron con el famoso cerro del Potosí.
Hemos venido a acompañarlos en esta Cumbre del Grupo de los 77 más China. Somos más de 130 naciones, que tenemos problemas comunes. Juntos, constituimos un importante actor internacional. Podemos influir, si nos lo proponemos, en las decisiones de las Naciones Unidas, en los asuntos de la paz y del desarrollo, en la preservación del medio ambiente. Era muy importante estar aquí, con ustedes, apoyando el liderazgo y el ejemplo del compañero Evo Morales y de Bolivia.
Queremos agradecerles a los bolivianos su generosidad y solidaridad. Sobre todo, por haber acogido, como en familia, a cientos de colaboradores cubanos, y porque al ser ustedes protagonistas de un proceso de cambio inédito en su país, han realizado una contribución invaluable al proceso de luchas de Nuestra América, como la llamó José Martí, por la definitiva independencia e integración de todos nuestros pueblos.
Evo me ha contado detalles de las luchas campesinas en este país, de los pueblos originarios, de los cocaleros, cuando él era líder sindical allá en el Chapare. También hemos hablado de los mineros, cuyos sindicatos son de los más combativos en toda la región. Yo le decía, guiándome por nuestra propia experiencia en Cuba: esas masas trabajadoras unidas, con la conciencia política y de clase que han adquirido, con la combatividad acumulada en sus luchas, son realmente invencibles.
Esa es la experiencia de varios de nuestros países hermanos. Fíjense que el imperialismo y la oligarquía lo primero que hacen es atacar la unidad del pueblo, dividir al pueblo, exacerbar diferencias, que siempre las hay, enfrentar a amigos y hermanos. Esa estrategia de división solo puede responderse con unidad, unidad y más unidad.
Hoy Venezuela merece nuestro más resuelto apoyo. El imperialismo y los oligarcas, que no pudieron contra el presidente Chávez en 18 elecciones, el golpe de estado y el golpe petrolero, piensan que ha llegado el momento de destruir la Revolución bolivariana y derrocar al gobierno del Presidente Maduro, empleando métodos de guerra no convencional.
Defendiendo a Venezuela, defendemos a Bolivia y a toda Nuestra América. Venezuela es hoy el borde delantero de la defensa de nuestra independencia, libertad y dignidad.
Sería un duro golpe si se frena el proceso de verdadera integración en marcha, en el que participan diversas organizaciones y cuyo punto culminante es la CELAC.
Miren lo que ha hecho Bolivia: Nacionalizó los hidrocarburos y los puso al servicio de todas las bolivianas y bolivianos. Acabó con la exclusión y la explotación de las mayoritarias comunidades indígenas y campesinas del país. Redistribuyó la riqueza nacional en beneficio de todo el pueblo, en especial de los sectores más vulnerables. Redujo la extrema pobreza en un 20 por ciento. Se proclamó territorio libre de analfabetismo.
Los bonos para la mujer embarazada y el recién nacido, para las familias con hijos en la escuela primaria, el desayuno escolar y la renta para los ancianos son importantes conquistas. Más de 6 500 bolivianos pobres han estudiado carreras universitarias, mayormente medicina, o se calificaron como trabajadores sociales. Se han construido varias decenas de clínicas integrales y centros oftalmológicos al servicio de la salud del pueblo humilde de Bolivia. En apenas diez años, se han brindado millones de consultas médicas en el Programa “Mi Salud”, y más de 600 mil bolivianos recuperaron la vista.
Se construyen fábricas, se desarrolla la cultura, el deporte y las ciencias, se incrementa el intercambio comercial entre nuestros países.Se ha reducido el índice de desempleo y la economía boliviana crece sostenidamente por encima del 6%.
Evo:
Te deseamos éxitos en esta inmensa tarea, como se los deseamos a todos ustedes, queridos hermanos y hermanas bolivianas.
Construyamos juntos la Patria Grande, defendamos nuestra unidad. Permítanme, también, que diga aquí, como el Che Guevara, “¡Hasta la victoria siempre!”.
Muchas gracias.


15 de junio de 2014 16:06:15