viernes, 5 de agosto de 2016

El Big Show de discursos y nominaciones: es mejor mala conocida que peor por conocer


Frente CIPI.jpgMsc. Enrique R. Martínez Díaz
CIPI

Tras la nominación de Hillary Clinton el pasado 28 de Julio en la Convención del Partido Demócrata en la ciudad de Filadelfia,  la escena ha quedado lista para el siguiente acto de la tragicomedia que cada cuatro años se celebra en el país norteño. El otro protagonista lo será, por el Partido Republicano, el magnate Donald Trump. Aun cuando hay otros aspirantes a la presidencia del imperio, se sabe claramente que solo ellos dos disponen de los recursos, tanto financieros como organizativos, para poder optar por ganar la presidencia; no existen antecedentes de que un tercer candidato haya logrado alcanzar la victoria; los casos de Teddy Roosevelt en 1912 y de Ross Perot en 1992 son muy demostrativos;  en ambos casos, solo sirvieron para afectar al partido Republicano, derrotado en ambas ocasiones.

Quisiéramos, no obstante, referirnos a los discursos de aceptación de ambos candidatos, en los cuales podemos encontrar algunas claves de cuáles pueden ser los temas principales de discusión en la próxima etapa de la campaña electoral, que tendrá como elemento más visible los debates en la televisión de ambos candidatos.

El discurso del aspirante por el Partido Republicano, el señor Trump estuvo orientado fundamentalmente hacia un sector muy definido del electorado norteamericano: las personas de clase media baja,  blancas, anglosajonas (los llamados WASP[i]); aunque proporcionalmente su peso se ha reducido dentro de la población de EE.UU., siguen siendo mayoritarios; ese grupo poblacional se siente heredero de los llamados padres fundadores y de los peregrinos (pilgrims) que colonizaron las 13 colonias en los siglos XVII y XVIII, y  consideran que ellos son la base de EE.UU., los verdaderos “americanos”; ha sido un sector muy afectado por la crisis económica de 2008, y aunque la economía estadounidense muestra una cierta recuperación según los índices macroeconómicos, los sectores mayoritarios de la población no han sido beneficiados. Una parte de la población ve como responsables a los grandes monopolios, pero otra parte importante culpa al gobierno, entre ellos, este sector que pudiera favorecer a Trump y es a ese grupo al que el aspirante republicano  envió su mensaje.
Otra de las características de este sector poblacional es que generalmente acude a las urnas con mayor masividad que otros grupos, y generalmente son muy conservadores; en ellos tienen gran influencia grupos como el llamado Tea Party.

La idea de “hacer grande a América otra vez”, el combate a la delincuencia, la inmigración ilegal, el nada velado racismo contra los inmigrantes latinos, musulmanes, etc, fueron temas muy destacados en el discurso, presentando la actual situación como consecuencia de la debilidad y la ineficacia del gobierno de Barack Obama.

Un elemento que no podemos dejar de mencionar, es como presenta Mr Trump,  sus “agotadas fuerzas armadas” y aseverando que los países en donde se encuentran desplegadas sus tropas tendrán que pagar por eso.   Decir eso es ignorar que las FF.AA. de EE.UU. son la base de su poderío nacional, y que uno de los elementos en que se sustenta ese poderío es la llamada “presencia avanzada” en los cinco continentes, en todos los mares, en el espacio cósmico e incluso en el llamado ciberespacio. El imperio no puede renunciar a esa capacidad, y es dudoso que convenza a sus aliados que le paguen por eso; incluso, algunos, como Israel, quieren que le aumenten la ayuda militar.

La candidata demócrata Hillary Clinton fue atacada con toda intención, especialmente en el espinoso asunto de los email con información clasificada, enviados desde direcciones particulares cuando la misma era Secretaria de Estado, así como otros asuntos en la trayectoria política de la Clinton. Generalmente,  en las campañas presidenciales es común que los candidatos saquen a relucir todos los “trapos sucios” de su contrincante,  generalmente de la forma más descarnada posible.

Por otra parte, el señor Trump se autoproclama como altamente capacitado para resolver los graves problemas que aquejan a ese gran país, aun cuando en su discurso no esbozó prácticamente ninguna medida concreta; es sabido que el candidato republicano es un experto en presentaciones televisivas, y evidentemente no necesita que lo alaben, él sabe cómo hacerse propaganda y explicarle a su audiencia que puede reactivar la economía estadounidense, de la misma forma que ha forjado una fortuna calculada en cerca de 10 mil millones de dólares.

Uno de los aspectos más importantes que planteó fue el de los llamados mega tratados comerciales, a los que catalogó de perjudiciales para los EE.UU.; aun cuando indudablemente, algunos efectos del TLC con Canadá y México pueden haber afectado algunos sectores económicos, no parecen ser reales sus aseveraciones y ataques contra este tratado; los mayores beneficiados de ese tratado han sido los grandes consorcios norteamericanos. Igualmente, es lo más probable que esos sean los resultados de los otros tratados en negociación, o sea, el TPP y el TTIP (a los cuales también fustigó), los cuales benefician a los grandes monopolios.

Para cualquier persona con un nivel elemental de raciocinio, y con un conocimiento mínimo de la historia norteamericana, es difícil creer que un personaje salido de las filas de la alta oligarquía norteamericana vaya a tomar medida económica alguna que no sea directamente encaminada a beneficiar a ese famoso 1% multimillonario, que es el verdadero poder en los EE.UU.

No obstante, debemos decir que al parecer, la nominación de Mr. Trump no goza de especiales simpatías dentro de importantes sectores del Partido Republicano, que no dio durante la Convención una imagen especialmente compacta; muchos personajes importantes no participaron, y ya algunos personajes de cierto renombre dentro del Great Old Party (Partido Viejo y Grande) o partido del elefante, han anunciado que no votarán por Trump.

Días después, como era esperado, la ex primera dama, ex senadora y ex secretaria de Estado fue nominada por el Partido Demócrata. La misma, dentro de su discurso de aceptación, aprovechando que ya Trump había hecho el suyo, fue bastante hábil en desmontar varias de las aseveraciones del candidato republicano. Explotó además algunas torpezas del aspirante republicano, sobre los militares norteamericanos, los inmigrantes, la explosividad de su carácter, etc. Sacó provecho además, de su condición femenina; es la primera mujer nominada a ese cargo por uno de los dos grandes partidos en la historia de los EE.UU., y lo hizo además de forma muy melodramática: saludando la presencia de su hija, y evocando a su difunta madre.

Lo cierto es que concluidas las convenciones de ambos partidos en los EE.UU., y definidos los candidatos, parece que en los próximos tres meses asistiremos a un divertido espectáculo, en el cual Mrs Clinton y Mr Trump harán todo lo posible por acumular fondos para sus campañas, ganar votos y de paso, denigrar a su adversario (en una suerte de striptease invertido, en el cual cada stripper le quita los trapos al adversario), con algunas verdades, algunas especulaciones, provocaciones, mentiras y todo tipo de artimañas (no olvidar el a todas luces amañado triunfo de George W. Bush en el año 2000, cuando se suspendió el recuento de votos en Florida).

Muchos en los EE.UU. apuestan ahora a que, en este caso, es mejor mala conocida que peor por conocer. Lo más probable es que cualquiera que sea el resultado de las elecciones, la paz y la seguridad mundial estará entre las perdedoras en estas elecciones.


[i] En EE.UU. se identifica con la sigla WASP (que literalmente significa avispa) a aquellas personas que son blancas (Whites), anglosajonas (AngloSaxon) y pertenecientes a religiones protestantes (Protestant)

viernes, 22 de julio de 2016

Echándole gasolina al fuego: el despliegue del sistema THAAD en la Península Coreana



MSc Enrique R. Martínez Díaz
CIPI

Recientemente fue anunciada la decisión por parte de las Fuerzas Armadas de EE.UU, de desplegar una batería del sistema de defensa antiaérea de gran alcance denominado THAAD[1] en la República de Corea (RC), como parte de un acuerdo entre ambos países (EE.UU. y la RC) para incrementar la seguridad de ambos ante las “amenazas”  que significan el desarrollo por parte de la República Popular Democrática de Corea de mísiles balísticos.

De acuerdo a las informaciones disponibles, los norteamericanos tienen desplegados baterías del sistema THAAD en su territorio continental, en Hawái y en las islas Guam (como se conoce, ambas islas ubicadas en el océano Pacífico). La primera batería de estos mísiles en la RC se desplegará en Seongju, en el centro del país, y a unos 290 kms (180 millas statute) al sur de Seul.

Es dudoso pensar que el despliegue de este sistema, por muy sofisticado y eficiente que sea, eliminará para las fuerzas militares norteamericanas y sus aliados surcoreanos el peligro que significa para ellos, de acuerdo a sus planteamientos, la posesión de sistemas balísticos más modernos o de mayor alcance por parte de la RPDC, máxime cuando es conocido que esa nación posee desde hace tiempo, e incluso ha exportado, mísiles balísticos de mucho menor alcance, como versiones del célebre mísil SCUD. 

Dadas las distancias existentes entre la RPDC y los principales objetivos político-militares en la RC, incluyendo las bases militares estadounidenses, esa argumentación es poco sostenible. Baste señalar que el 19 de Julio de este año 2016 se reportó el lanzamiento de prueba de tres misiles Scud, con un alcance de 600 kms,  por parte de la RDPC; un reporte de la agencia KNNews informaba que con ese alcance pueden ser golpeados objetivos en Seúl, la capital de la RC, y Busan, segunda ciudad  del país, situada en la costa sur de la península.

Pudiera considerarse que el despliegue de esa batería THAAD complementa las capacidades de los buques de la US NAVY con el sistema AEGIS desplegados en los mares cercanos a Japón, y que coadyuva a la defensa de ese país (y de las fuerzas militares norteamericanas allí ubicadas), de acuerdo a las informaciones brindadas por los mandos militares estadounidenses.

Como existe una ciencia llamada historia, que algunos políticos occidentales (incluido el actual presidente de los EE.UU.) llaman constantemente a olvidar (sobre todo cuando les conviene, o los deja mal parados), uno no puede dejar de recordar que en 1991 los muy celebrados por entonces mísiles antiaéreos Patriot, de fabricación norteamericana,  no pudieron evitar que varios misiles SCUD lanzados por las fuerzas de Saddam Hussein hicieran blanco en Israel (un reporte de un centro de investigaciones norteamericano consultado plantea que la efectividad de los Patriot osciló entre un 40 y un 50%; o sea, que la mitad de los mísiles SCUD lanzados por Irak no fueron interceptados). Para otros, esto puede significar que el despliegue del mucho más moderno sistema THAAD, que por cierto no ha sido aún verificado en acciones combativas, no es garantía de seguridad para los posibles blancos, como probablemente no lo sea ningún sistema de armamentos de país alguno.  Lo único seguro contra las armas es que estas no existan, o sea, el desarme y la paz.

Por su parte, tanto el gobierno de la República Popular China como el de la Federación de Rusia han manifestado su desacuerdo con el despliegue de dicho sistema en la península coreana, manifestando que esta acción violenta el equilibrio estratégico en el Este de Asia, y pretende adjudicar ventajas a EE.UU. y sus aliados respecto a esas naciones.

Estos estados argumentan que dicho sistema puede contribuir a contrarrestar un golpe de respuesta por parte de sus países si son atacados en un primer golpe por parte de los norteamericanos; este argumento es el mismo que esgrimen los rusos respecto al despliegue en Europa del sistema de defensa contra mísiles norteamericano; es conocido que en círculos militares estadounidenses, desde la lejana década del 50 del pasado  siglo, es muy popular la teoría del “primer golpe”, o algo así como los llamados “golpes preventivos” o “anticipados” (preemptly) del anterior presidente norteamericano George W. Bush.

Por su parte, el gobierno de la RPDC, como es usual, ha respondido amenazando con aplicar “medidas físicas” contra el mentado despliegue, considerando esta acción como una amenaza directa contra su país y planteando su decisión de interrumpir el hasta hoy único canal de comunicación entre su gobierno y el de los EE.UU.

Los hechos demuestran que a pesar de que el despliegue del sistema THAAD se ha venido negociando desde hace más de dos años, tanto los norteamericanos como sus aliados surcoreanos, al parecer, han desestimado las consecuencias negativas que tal acción puede acarrear para la paz y la estabilidad en el Este de Asia.

Ante todo, la solución del añejo conflicto de la Península coreana ha sido repetidamente torpedeado por las sucesivas administraciones norteamericanas desde 1953, por diferentes motivos, aunque el principal de todos, en nuestro criterio, sigue siendo el que los imperialistas anidados a orillas del Potomac saben que una pacificación de esa región haría innecesaria su presencia militar en la misma, lo cual es contrario a sus intereses en el Este de Asia. No es ocioso recordar que el actual inquilino de la Casa Blanca ha sido el impulsor del llamado Rebalance hacia el Pacífico; por lo tanto, mantener e incrementar sus fuerzas en la RC coadyuva a dicho propósito.

Uno de los principales interesados en solucionar el conflicto en dicha área es el gobierno de Beijing, dado el claro hecho de que esa zona de conflicto está a sus puertas, tanto terrestres como marítimas. Por años el gobierno chino se esforzó en el desarrollo de las llamadas “conversaciones a seis bandas”, y aún sigue llamando a resolver este conflicto de forma negociada.

Como se conoce, la RPDC está sometida a un régimen especialmente fuerte de sanciones por parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que indudablemente ha afectado la situación de esa nación de 25 millones de habitantes.

El gobierno de Pyongyang es conocido por su política de priorizar la defensa, justificable si se tiene en cuenta la cruenta guerra de 1950-1953 y la sostenida hostilidad norteamericana y de sus aliados en la región, que realizan constantes maniobras y ejercicios militares de todo tipo. La no consecución de un tratado de paz, y la vigencia, contra toda lógica, de un “Armisticio” que pronto cumplirá 63 años, no hace pensar que los gobernantes de la RPDC puedan confiar en sus declarados enemigos.

Es muy curioso que naciones que gastan más dinero en armamentos que el producto interno bruto de la RPDC  acusen a esta nación por desarrollar armas para su defensa. Todos estamos de acuerdo en la necesidad de que no proliferen las armas de destrucción masiva, y en el desarme, pero debemos desarmarnos todos, no pedir que se desarmen solamente los demás. En el caso de EE.UU., el gasto militar de esa nación es prácticamente equivalente  a lo que gastan todos los restantes países del mundo, y aun así,  no se cansan sus dirigentes políticos de levantar fantasmas por todas partes.

Cualquiera pudiera comprender que una nación pequeña, bloqueada y con grandes dificultades económicas no tendría que parecer una amenaza significativa para una superpotencia como EE.UU.; y es lógico considerar que ningún país pequeño atacaría primero a esa nación, pues la respuesta  que pudiera recibir sería demoledora.

Entonces queda la opción lógica: los países pequeños, que se consideran amenazados, buscan tener armas que les permitan RESPONDER a un ataque norteamericano, y principalmente DISUADIR  a los gobernantes de EE.UU. de atacarlos. Esta lógica parte del conocimiento de que el país que ha desatado más guerras en el siglo XX, y lo que va del XXI es precisamente  EE.UU.

Solo mediante negociaciones claras, sin búsqueda de imposiciones,  encaminadas a lograr la seguridad de los estados, es posible lograr que se eliminen los programas de desarrollo de armamentos en todos  los países del mundo. Todos los gobiernos del mundo deben comprometerse con la Paz.

¡Un Mundo Mejor es Posible!

Nota:

[1] THAAD son las siglas de Terminal High Altitude Area Defense,  o sea, Terminal de Defensa Antiaérea de Área De Gran Altitud

Bibliografía:

Lewis George N; Fetter, Steve; Gronlund, Lisbeth; DACS Working Paper     March 1993       CASUALTIES AND DAMAGE FROM SCUD ATTACKSIN THE 1991 GULF WARMIT Center for International Studies. Massachusetts, 1993
(web.mit.edu/ssp/publications/working_papers/wp93-2.pdf )

NKNews.Org. North Korea launches three SCUD-variant missiles. 19 Julio 2016
https://www.nknews.org/2016/07/north-korea-launches-three-short-range-missiles-media/



Cuba y los interesados presagios: ¿Por qué la situación de hoy no es la de los 90?



Por Randy Alonso Falcón
Cubadebate
 
Por estos días. El Nuevo Herald y otras auras mediáticas, se regodean pintando un oscuro escenario cubano de retorno a los días más difíciles del Período Especial. Se trata de sembrar entre los nuestros la incertidumbre, la zozobra y la desconfianza; de cara al mundo, se busca ensombrecer expectativas y admiración por Cuba.

Como reconocía el General de Ejército Raúl Castro en la reciente sesión de la Asamblea Nacional, el país está enfrentando dificultades temporales derivadas de restricciones financieras externas, por una baja en los ingresos provenientes de las exportaciones y limitaciones que enfrentan varios de los principales socios comerciales de Cuba por la caída de los precios del petróleo.

A ello se añade una contracción en los suministros de combustibles acordados con Venezuela.

En ese contexto, señaló el Presidente cubano, “… comienzan a aparecer especulaciones y augurios de un inminente colapso de nuestra economía con el retorno a la fase aguda del período especial que nos enfrentamos a inicios de la década del 90 del pasado siglo y que supimos superar gracias a la capacidad de resistencia del pueblo cubano y su confianza ilimitada en Fidel y el Partido. No negamos que puedan presentarse afectaciones, incluso mayores que las actuales, pero estamos preparados y en mejores condiciones que entonces para revertirlas”.

¿Qué diferencia a la economía cubana de hoy de la de 1990, que la pone en circunstancias más ventajosas para enfrentar las dificultades? Apunto algunos elementos que me parecen significativos:

•En 1990 el comercio exterior cubano se concentraba en más de un 80% en el intercambio con la URSS y los países de Europa del Este, dada las restricciones que el bloqueo norteamericano imponía al resto de los posibles mercados – lo que provocó una estrepitosa caída de nuestras exportaciones e importaciones tras el colapso del socialismo por aquellos lares– (1); hoy este está algo más diversificado por países y regiones, pese a los obstáculos que aún enfrenta y la necesidad de seguir ampliándose. Venezuela tiene un peso relevante, pero hay significativos intercambios con Canadá, China, Rusia, España, Brasil, Angola y otros países.

•En el 90 Cuba se quedó sin fuentes de crédito – por la ruptura de los socios tradicionales, el no pago de los servicios de la deuda desde 1986  y el recrudecimiento del bloqueo-; hoy se ha logrado renegociar ventajosamente las deudas con el Club de París y otros acreedores, en términos que permiten acceder a nuevos financiamientos proporcionales a los pagos de débito que se hagan.

•Si la Inversión Extranjera era entonces apenas camino iniciado (simbolizada en la inauguración del Hotel Sol Palmeras el 10 de mayo de 1990) y no nos dotamos de una Ley de Inversión Extranjera hasta 1995; llegamos a la etapa actual con una legislación actualizada en el 2014 (más atractiva y flexible), con la definición conceptual de que la Inversión Extranjera es componente imprescindible de nuestro desarrollo, con una Cartera de Oportunidades que va creciendo y estableciendo prioridades nacionales claras para la inversión y con una promisoria Zona de Desarrollo Especial del Mariel, que empieza a poblar sus espacios y multiplicar la actividad de su puerto.

•Si en 1990 el turismo, que empezaba a definirse como esfera económica promisoria, apenas contaba en el año con 340 mil visitantes extranjeros y 243 millones de dólares de ingreso, hoy es la segunda rama generadora de divisas del país y cerró el 2015 con 3 millones 524 mil 779 visitantes del mundo e ingresos brutos por 2 818.6 millones de CUC. Las perspectivas de continuar creciendo en esta rama son claras.

•La exportación cubana de servicios apenas hacía pininos a inicios de los 90; hoy constituye la mayor fuente de divisas del país (2), gracias a la labor de médicos, maestros y otros profesionales en decenas de naciones del mundo. Como Fidel había predecido en los días de la Batalla de Ideas, el país comienza a vivir de su inteligencia cultivada.

• Si en el 90, la Biotecnología y la Industria Farmacéutica, impulsadas en la década pasada por Fidel, mostraban los primeros indicios de su prometedor camino con productos de avanzada para Cuba y el mundo; al finalizar el 2015, esta rama científico productiva es una de las mayores exportadoras del país, halada por el empuje de centros emblemáticos como el CIGB y otros nacidos en pleno Período Especial como el Centro de Inmunología Molecular. Lo producido por el Grupo BioCubaFarma en el 2015, le ahorró a Cuba en importaciones más de 1 940 millones de dólares, según se informó en la más reciente sesión de la Asamblea Nacional (3). Se trabaja en unos 450 productos que responden al programa de investigación–desarrollo de esta entidad científico–empresarial.

•Si en 1990 Cuba apenas produjo 670 000 toneladas de petróleo en el año e importó el 98% del combustible que necesitaba; ahora tiene una capacidad productiva de unos 4 millones de toneladas anuales de petróleo equivalente (4) e importa el 59% de las necesidades.

•En el 90, la generación eléctrica era a base totalmente de combustible importado y casi únicamente producida por termoeléctricas (lo que nos llevó a los largos apagones generalizados cuando dejamos de recibir el combustible soviético); el panorama actual (cimentado en la Revolución Energética impulsada por Fidel), muestra un sistema electroenergético basado en buena medida en el combustible nacional para mover las termoeléctricas y las modernas plantas generadoras a partir del gas acompañante. Además de la incorporación desde principios de este siglo de baterías de grupos electrógenos en todos los territorios y unidades individuales en centros priorizados, que generaron en el 2015 4 398,8 gigawatts hora, una quinta parte de la generación anual del país. A ello se suma el creciente uso de fuentes renovables de energía, contando ya con 4 parques eólicos, varios parques fotovoltaicos y pequeñas minihidroeléctricas. Se comienza la ejecución de plantas bioeléctricas en varias provincias y el país aspira a tener en el 2030 un 24% de generación a partir de las fuentes renovables (5)

•Si a principios de los 90 se paralizaron total y/o parcialmente numerosas inversiones, sin posibilidades para su completamiento y puesta en marcha; ahora el país cuenta con la capacidad de preservar el financiamiento de las inversiones planeadas en los sectores estratégicos para el desarrollo nacional como el turismo, el níquel, la construcción y las energías renovables, en montos que superan los 6 mil millones de pesos en ambas monedas.

•El empleo sufrió un duro golpe en los 90, cuando la casi totalidad de los trabajadores eran estatales y miles se quedaron sin contenido de trabajo, recibiendo una parte del salario, y otros tantos tuvieron que ser reubicados. Hoy la composición del empleo en el país es diferente, con el impulso del trabajo por cuenta propia y cooperativo. Al cierre del 2015, el 29% de los trabajadores laboraban en el sector no estatal de la economía.

No hay dudas de que tenemos y tendremos dificultades en los próximos meses. Una economía abierta como la cubana, con importante dependencia de sus intercambios extrafrontera, está expuesta a los avatares poco halagüeños de la economía y el comercio internacionales y a las dificultades de sus principales socios. Sumémosle que el bloqueo estadounidense sigue ahí en sus esencias y continúa provocando daños.

Pero de eso al nerviosismo, la parálisis y el desasosiego con que fuentes interesadas cuentan nuestros días, va un buen trecho. Que no cunda el pánico ni dejemos que los que nos quieren enterrados nos siembren el desaliento. No permitamos que imperen oportunistas, aprovechados, especuladores y manipuladores de oficio. El país tiene hoy elementos ventajosos respecto a los 90 para enfrentar las dificultades. Las alternativas buscadas por Fidel y la dirección de la Revolución a los problemas enfrentados durante los más peliagudos momentos del Período Especial – cuando en el mundo no creían que la Revolución sobreviviría -, y la actualización paulatina de nuestro modelo económico en los últimos años, nos han abierto caminos labrados con nuestro propio esfuerzo. Tenemos además la experiencia táctica y estratégica de todos estos años y el aprender de los errores cometidos.

Trabajo, esfuerzo, ahorro, inteligencia, unidad, confianza en nuestras capacidades son las claves del momento para transitar el rumbo adecuado. Que una oscuridad momentánea no desvía nuestra vista de la luz que se enciende por allá en el futuro. De eso hablamos los cubanos en estos días en diversos debates sobre el modelo de sociedad al que mayoritariamente aspiramos.

Notas:

1)Entre 1990 y 1993 las importaciones de Cuba se redujeron en un 70% (Ver “La Economía Cubana en el Período Especial 1990 – 2000”, Banco Central de Cuba)

2)En el 2014, el Gobierno informaba que los servicios contratados en el exterior del personal de salud cubano generaba anualmente unos 8 mil millones de dólares de ingresos.

3)Ver en Cubadebate: “BioCubaFarma ahorró a Cuba mil 900 millones de dólares”, 6 de julio de 2016

4)La producción de petróleo equivalente tuvo una leve caída en el 2015 al extraerse 3 891 000 toneladas

5)Para el 2030 el país prevé contar con 19 bioeléctricas, 13 parques de energía eólica, 74 pequeñas hidroeléctricas y 700 MW producidos en parques de energía solar, en emplazamientos distribuidos en todo el país.

***Todos los datos de los 90 son tomados del informe “La Economía Cubana en el Período Especial 1990 – 2000”, del Banco Central de Cuba. Los datos de 2015 son tomados del Anuario Estadístico de 2015 de la ONEI.