viernes, 12 de julio de 2013

Edad Media europea



Por  Serge Halimi 


Director de Le Monde diplomatique.


¿Las políticas económicas impuestas para sostener el euro son todavía compatibles con las prácticas democráticas? La televisión pública griega fue creada una vez finalizada la dictadura militar. El gobierno que ejecuta en Atenas las imposiciones de la Unión Europea (UE) prefirió remplazarla por una pantalla negra sin autorización del Parlamento. Esperando que la justicia griega suspendiera la decisión, la Comisión de Bruselas hubiera podido recordar el texto de la Unión según el cual “el sistema audiovisual público en los Estados miembros está directamente ligado a las necesidades democráticas, sociales y culturales de toda sociedad”. Prefirió avalar este acto de violencia alegando que el cierre se inscribía “en el contexto de los esfuerzos considerables y necesarios que las autoridades estiman para modernizar la economía griega”.

Los europeos pasaron por la experiencia de proyectos constitucionales rechazados por el sufragio popular y sin embargo aplicados. Recuerdan a los candidatos que, después de haberse comprometido a renegociar un tratado, lo hacen ratificar sin cambiar una sola coma. En Chipre poco faltó para sufrir la exacción de todos los depósitos bancarios (1). Acaba de franquearse, pues, una etapa más; la Comisión de Bruselas se lava las manos ante la destrucción de los medios griegos que no pertenecen todavía a armadores, en cuanto eso permite despedir, al mismo tiempo, a dos mil ochocientos trabajadores del sector público que execra desde siempre. Y lograr así los objetivos de supresión de empleos dictados por la “troika (2)” a un país en el cual el 60% de los jóvenes están desocupados.

Esta determinación coincide con la publicación, por la prensa estadounidense, de un informe confidencial del Fondo Monetario Internacional que concede que las políticas puestas en práctica en Grecia desde hace tres años han terminado en “fracasos flagrantes”. ¿Se trata de un malentendido imputable únicamente a una previsión de crecimiento optimista? De ninguna manera. Según la interpretación que hace el Wall Street Journal en un texto revelador, el FMI confiesa que una “reestructuración inmediata [de la deuda griega] hubiera sido más barata para los contribuyentes europeos, pues los acreedores del sector privado fueron rembolsados íntegramente gracias al dinero que pidió prestado Atenas. La deuda griega no fue reducida, sino que ahora se la debe al FMI y a los contribuyentes de la eurozona más que a los bancos y a los fondos especulativos (3).

Así, los especuladores se desprendieron sin perder un céntimo de los préstamos que habían otorgado a Atenas a tasas de interés astronómicas. Pensamos que tal maestría en el despojo de los contribuyentes europeos en beneficio de los fondos especulativos confiere una autoridad particular a la “troika” para martirizar un poco al pueblo griego. Pero después de la televisión pública, quedan los hospitales, las escuelas, las universidades a las que se podría cerrar sin encontrar resistencia... Y no solo en Grecia. Únicamente a este precio Europa entera mantendrá su rango en la carrera triunfal hacia la Edad Media... g

 Notas:

1. Véase “La lección de Nicosia”, Le Monde diplomatique, edición chilena, abril de 2013.

2. Constituida por la UE, El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Central Europeo (BCE).

3. “IMF Concedes It Made Mistakes in Greece”, The Wall Street Journal, Nueva York, 5 de junio de 2013.


¡TODOS FICHADOS!

Mediante programas secretos de vigilancia como PRISM, el Gobierno estadounidense accede a archivos, audios, vídeos, correos electrónicos y fotografías de los usuarios de Microsoft, Yahoo, Google, Facebook, PalTalk, AOL, Skype, YouTube y Apple.

Por Ignacio Ramonet

Nos lo temíamos.[1] Y tanto la literatura (1984, de George Orwell) como el cine de anticipación (Minority Report, de Steven Spielberg) nos habían avisado: con los progresos de las tecnologías de comunicación todos acabaríamos siendo vigilados. Claro, intuíamos que esa violación de nuestra privacidad la ejercería un Estado neototalitario. Ahí nos equivocamos. Porque las inauditas revelaciones efectuadas por el valeroso Edward Snowden sobre la vigilancia orwelliana de nuestras comunicaciones acusan directamente a Estados Unidos, país antaño considerado como “la patria de la libertad”.
 Al parecer, desde la promulgación en 2001 de la ley “Patriot Act”,[2] eso se acabó. El propio presidente Barack Obama lo acaba de admitir: “No se puede tener un 100% de seguridad y un 100% de privacidad”. Bienvenidos pues a la era del ‘Gran Hermano’...
¿Qué revelaciones ha hecho Snowden? Este antiguo asistente técnico de la CIA, de 29 años, y que últimamente trabajaba para una empresa privada ―la Booz Allen Hamilton [3]― subcontratada por la Agencia estadounidense de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés), reveló mediante filtraciones a los diarios The Guardian y The Washington Post, la existencia de programas secretos que permiten la vigilancia de las comunicaciones de millones de ciudadanos por parte del Gobierno de Estados Unidos.
Un primer programa entró en vigor en 2006. Consiste en espiar todas las llamadas telefónicas que se efectúan, a través de la compañía Verizon, dentro de Estados Unidos, y las que se hacen desde allí hacia el extranjero. Otro programa, llamado PRISM, fue puesto en marcha en 2008. Supone la recolección de todos los datos enviados por Internet ―correos electrónicos, fotos, vídeos, chats, redes sociales, tarjetas de crédito...― únicamente (en principio) por extranjeros que residen fuera del territorio norteamericano. Ambos programas han sido aprobados en secreto por el Congreso de Estados Unidos, al que se habría mantenido, según Barack Obama, “constantemente informado” sobre su desarrollo.
Sobre la dimensión de la increíble violación de nuestros derechos civiles y de nuestras comunicaciones, la prensa ha aportado detalles espeluznantes. El 5 de junio, por ejemplo, The Guardian publicó la orden emitida por el Tribunal de Supervisión de Inteligencia Extranjera, que exigía a la compañía telefónica Verizon la entrega a la NSA del registro de decenas de millones de llamadas de sus clientes. El mandato no autoriza, al parecer, a conocer el contenido de las comunicaciones ni los titulares de los números de teléfono, pero sí permite el control de la duración y el destino de esas llamadas. El día siguiente The Guardian y The Washington Post revelaron la realidad del programa secreto de vigilancia PRISM, que autoriza a la NSA y al FBI a acceder a los servidores de las nueve principales empresas de Internet (con la notable excepción de Twitter): Microsoft, Yahoo, Google, Facebook,[4] PalTalk, AOL, Skype, YouTube y Apple.
Mediante esta violación de las comunicaciones, el Gobierno estadounidense puede acceder a archivos, audios, vídeos, correos electrónicos o fotografías de sus usuarios. PRISM se ha convertido de ese modo en la herramienta más útil de la NSA a la hora de elaborar los informes que diariamente entrega al presidente Obama. El 7 de junio, los mismos diarios publicaron una directiva de la Casa Blanca en la que el presidente ordenaba a sus agencias de inteligencia (NSA, CIA, FBI) establecer una lista de posibles países susceptibles de ser ‘ciberatacados’ por Washington. Y el 8 de junio, The Guardian filtró la existencia de otro programa que permite a la NSA clasificar los datos que recopila en función del origen de la información. Esta práctica, orientada al ciberespionaje en el exterior, permitió recopilar ―sólo en marzo pasado― unos 3.000 millones de datos de ordenadores en Estados Unidos...
Durante estas últimas semanas, ambos periódicos han ido revelando, gracias a filtraciones de Edward Snowden, nuevos programas de ciberespionaje y vigilancia de las comunicaciones en países del resto del mundo. “La NSA ―explicó Edward Snowden― ha construido una infraestructura que le permite interceptar prácticamente cualquier tipo de comunicación. Con estas técnicas, la mayoría de las comunicaciones humanas se almacenan para servir en algún momento a un objetivo determinado”.
La Agencia de Seguridad Nacional (NSA), cuyo cuartel general se halla en Fort Meade (Maryland), es la más importante y la más desconocida agencia de inteligencia norteamericana. Es tan secreta que la mayoría de los estadounidenses ignora su existencia. Controla la mayor parte del presupuesto destinado a los servicios de inteligencia, y produce más de cincuenta toneladas de material clasificado al día... Ella ―y no la CIA― es quien posee y opera el grueso de los sistemas estadounidenses de recogida secreta de material de inteligencia: desde una red mundial de satélites hasta las decenas de puestos de escucha, miles de ordenadores y los masivos bosques de antenas situados en las colinas de Virginia Occidental. Una de sus especialidades es espiar a los espías, o sea a los servicios de inteligencia de todas las potencias, amigas o enemigas. Durante la guerra de las Malvinas (1982), por ejemplo, la NSA descifró el código secreto de los servicios de inteligencia argentinos, haciendo así posible la transmisión de información crucial a los británicos sobre las fuerzas argentinas...

Todo el sistema de interceptación de la NSA puede captar discretamente cualquier e-mail, cualquier consulta de Internet o conversación telefónica internacional. El conjunto total de comunicaciones interceptadas y descifradas por la NSA constituye la principal fuente de información clandestina del Gobierno estadounidense.
La NSA colabora estrechamente con el misterioso sistema Echelon. Creado en secreto, después de la Segunda Guerra Mundial, por cinco potencias (los “cinco ojos”) anglosajonas: Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. Echelon es un sistema orwelliano de vigilancia global que se extiende por todo el mundo y está orientado hacia los satélites que se utilizan para transmitir la mayor parte de las llamadas telefónicas, comunicaciones por Internet, correos electrónicos y redes sociales. Echelon puede captar hasta dos millones de conversaciones al minuto. Su misión clandestina es el espionaje de Gobiernos, partidos políticos, organizaciones y empresas. Seis bases a través del mundo recopilan las informaciones e interceptan de forma indiscriminada enormes cantidades de comunicaciones que los superordenadores de la NSA posteriormente criban mediante la introducción de palabras clave en varios idiomas.
En el marco de Echelon, los servicios de inteligencia estadounidense y británico han establecido una larga colaboración secreta. Y ahora hemos sabido, gracias a nuevas revelaciones de Edward Snowden, que el espionaje británico también pincha clandestinamente cables de fibra óptica, lo que le permitió espiar las comunicaciones de las delegaciones que acudieron a la Cumbre del G-20 de Londres en abril de 2009. Sin distinguir entre amigos y enemigos.[5]

Mediante el programa Tempora, los servicios británicos no dudan en almacenar colosales cantidades de información obtenida ilegalmente. Por ejemplo, en 2012, manejaron unos 600 millones de “conexiones telefónicas” al día y pincharon, en perfecta ilegalidad, más de 200 cables... Cada cable transporta 10 gigabytes [6] por segundo. En teoría, podrían procesar 21 petabytes [7] al día; lo que equivale a enviar toda la información que contiene la Biblioteca Británica 192 veces al día...
Los servicios de inteligencia constatan que ya hay más de 2.000 millones de usuarios de Internet en el mundo y que casi más de mil millones utilizan Facebook de forma habitual. Por eso se han fijado como objetivo, transgrediendo leyes y principios éticos, controlar todo lo que circula por Internet. Y lo están consiguiendo: “Estamos empezando a dominar Internet”, confesó un espía inglés, “y nuestra capacidad actual es bastante impresionante”. Para mejorar aún más ese conocimiento de Internet, la Government Communications Headquarters (GCHQ, Agencia de inteligencia británica) lanzó recientemente dos nuevos programas: Mastering The Internet (MTI) sobre cómo dominar Internet, e Interception Modernisation Programme para una explotación orwelliana de las telecomunicaciones globales. Según Edward Snowden, Londres y Washington acumulan ya, diariamente, una cantidad astronómica de datos interceptados clandestinamente a través de las redes mundiales de fibra óptica. Ambos países destinan en total a unos 550 especialistas a analizar esa titánica información.
Con la ayuda de la NSA, la GCHQ se aprovecha de que gran parte de los cables de fibra óptica que conducen las telecomunicaciones planetarias pasan por el Reino Unido, y los ha interceptado con sofisticados programas informáticos. En síntesis, miles de millones de llamadas telefónicas, mensajes electrónicos y datos sobre visitas a Internet son acumulados sin que los ciudadanos lo sepan, bajo pretexto de reforzar la seguridad y combatir el terrorismo y el crimen organizado.
Washington y Londres han puesto en marcha un orwelliano plan ‘Gran Hermano’ con capacidad de saber todo lo que hacemos y decimos en nuestras comunicaciones. Y cuando el presidente Obama apela a la ‘legitimidad’ de tales prácticas de violación de la privacidad, está defendiendo lo injustificable. Además, hay que recordar que por haber realizado labores de información sobre peligrosos grupos terroristas con base en Florida ―o sea, una misión que el presidente Obama considera hoy como ‘perfectamente legítima’― cinco cubanos fueron detenidos en 1998 y condenados por la Justicia estadounidense a largas e inmerecidas penas de prisión.[8] Un escándalo judicial que es hora de reparar liberando a esos cinco héroes.[9]

El presidente Barack Obama está abusando de su poder y restando libertad a todos los ciudadanos del mundo. “Yo no quiero vivir en una sociedad que permite este tipo de actuaciones”, protestó Edward Snowden cuando decidió hacer sus impactantes revelaciones. Las divulgó, y no es casualidad, justo cuando empezaba el juicio contra el soldado Bradley Manning, acusado de filtrar secretos a WikiLeaks, la organización internacional que publica informaciones secretas de fuentes anónimas. Y cuando el cibermilitante Julian Assange lleva un año refugiado en la Embajada de Ecuador en Londres... Snowden, Manning, Assange, son paladines de la libertad de expresión, luchadores en beneficio de la salud de la democracia y de los intereses de todos los ciudadanos del planeta. Hoy acosados y perseguidos por el ‘Gran Hermano’ estadounidense.[10].
¿Por qué estos tres héroes de nuestro tiempo aceptaron semejante riesgo que les puede hasta costar la vida? Edward Snowden, obligado a pedir asilo político en Ecuador, contesta: “Cuando te das cuenta de que el mundo que ayudaste a crear va a ser peor para la próxima generación y para las siguientes, y que se extienden las capacidades de esa arquitectura de opresión, comprendes que es necesario aceptar cualquier riesgo. Sin que te importen las consecuencias”.


Notas:

1. Véase Ignacio Ramonet, “Vigilancia total” y “Control social total”, en Le Monde diplomatique en español, respectivamente agosto de 2003 y mayo de 2009.
2. Propuesta por el presidente George W. Bush y adoptada en el contexto emocional que sucedió a los atentados del 11 de septiembre de 2001, la ley “Patriot Act” autoriza controles que interfieren en la vida privada, suprimen el secreto de la correspondencia y la libertad de información. Ya no se exige una autorización para las escuchas telefónicas. Y los investigadores pueden acceder a las informaciones personales de los ciudadanos sin orden de registro.

3. En 2012, esta empresa le facturó a la Administración estadounidense 1.300 millones de dólares por “asistencia en misiones de inteligencia”.
4. Hemos sabido recientemente que Max Kelly, el responsable principal de seguridad de Facebook, encargado de proteger la información personal de los usuarios de esta red social contra ataques externos, dejó esta empresa en 2010 y fue reclutado... por la NSA.
5. Espiar a diplomáticos extranjeros es legal en el Reino Unido: lo ampara una ley aprobada por los conservadores británicos en 1994 que pone el interés económico nacional por encima de la cortesía diplomática.
6. El byte es la unidad de información en informática. Un gigabyte es una unidad de almacenamiento de información cuyo símbolo es GB, y equivale a mil millones de bytes, equivalente, en texto escrito, a una furgoneta llena de páginas con texto.

7. Un petabyte (PT) equivale a un millón de GB.
8. La misión de los cinco ―Antonio Guerrero, Fernando González, Gerardo Hernández, Ramón Labañino y René González― consistía en infiltrar y observar las actuaciones de grupos de exiliados cubanos para prevenir actos de terrorismo contra Cuba. A propósito del juicio que condenó a varios de ellos a penas de cadena perpetua, Amnistía Internacional declaró en un comunicado que “durante el juicio no se presentó ninguna prueba que demostrase que los acusados realmente hubieran manejado o transmitido información clasificada”.
9. Véase Fernando Morais, Los últimos soldados de la guerra fría, Editorial Arte y Literatura, La Habana, 2013.
10. Edward Snowden corre el riesgo de ser condenado a 30 años de prisión después de haber sido acusado oficialmente por la Administración de Estados Unidos de “espionaje”, “robo” y “utilización ilegal de bienes gubernamentales”.


jueves, 11 de julio de 2013

PETROCARIBE y la integración económica regional



Por Hedelberto López Blanch

La crisis económica que ha asolado al mundo, iniciada en Estados Unidos en 2008 y que continuó por Europa Occidental y algunos países asiáticos, no resultó más violenta en la región de Centroamérica y el Caribe debido a la iniciativa del presidente bolivariano Hugo Chávez de crear PETROCARIBE.

Para consolidar la integración que ha ido logrando este grupo desde su creación en junio de 2005, sus miembros no han dejado de trabajar un solo instante, máxime con una amenaza latente que se observa en la zona donde Estados Unidos esta tratando de reavivar el Área de Libre Comercio para las Américas (ALCA), en versiones como la Alianza Pacífico y Tratados de Libre comercio bilaterales.

PETROCARIBE, en ese andar de unión latinoamericana, ha realizado dos Cumbres (la VII y la VIII) en un período de solo dos meses para apuntalar los intereses de sus 18 miembros.

En la VII, realizada en mayo de este año en Caracas, el ministro de Petróleo y Minería de Venezuela, Rafael Ramírez, explicó que las condiciones estaban dadas para que los países que integran el organismo pudieran trabajar y constituir una zona económica que permitiera seguir fortaleciendo la alianza entre la región y pasar del tema petrolero al desarrollo económico y comercial. 

En la recién concluida VIII Cumbre efectuada a finales de junio en Managua, se aprobaron proyectos relevantes como la Constitución de la Zona Económica PETROCARIBE, que constara con varios ejes de acción.

Según la Declaración Final, se contempla evaluar de manera transversal y multidisciplinaria los aspectos comerciales, económicos, financieros, científicos, tecnológicos y jurídicos en cinco programas estructurantes: transporte y comunicaciones, encadenamiento productivo, turismo, comercio e integración social y cultural. Es decir, aunque la base fundamental es el intercambio petrolero, se pasa a una nueva etapa con la consolidación de la zona económica para el desarrollo común que fomentará la productividad y el comercio entre los 18 países integrantes: Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nevis, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam, y Venezuela.

Como se conoce, desde su fundación, Venezuela entrega crudo a sus otros miembros en condiciones ventajosas, con un financiamiento que llega al 40 % cuando el precio del petróleo supera los 50 dólares; al 50 % si sobrepasa los 80 dólares y al 60 % cuando la barrera se sitúa en 100 dólares. El plazo de financiamiento es de 25 años y la tasa de interés que se aplica es de solo 1 %. 

Esto ha permitido a las pequeñas naciones de Centroamérica y el Caribe, enfrentar la profunda crisis capitalista mundial y los altos precios del crudo en el mercado internacional que han estado alrededor de los 100 dólares el barril.

Cifras oficiales ofrecidas por el ministro Ramírez indican que en el período 2005-2013 se suministró a esas naciones, 232 millones de barriles de petróleo y para compensar la factura del crudo se estableció un nuevo espacio de intercambio que llega a más de 1 462 toneladas de alimentos.

PETROCARIBE cuenta con un sistema de transporte, almacenamiento y refinación propia. Este último renglón alcanza una capacidad en el área de 135 000 barriles día, que aumentarán tras las ampliaciones y ejecuciones de refinerías en Cuba y Nicaragua.

Esfuerzos en generación eléctrica se llevan a cabo en San Cristóbal y Nevis, San Vicente y Las Granadinas, Nicaragua y Haití. Se utilizan buques propios del grupo para el intercambio de productos y mercancías lo cual libera a la región de pagar altos precios a las compañías marítimas transnacionales.

Asimismo, entre sus miembros se han constituido 13 empresas mixtas, 10 de ellas de hidrocarburos, una de petroquímica y una de transporte de alimentos. 

El fondo financiero creado desde el inicio por ese organismo, ya ha aportado más de 500 millones de dólares para más de 90 proyectos de desarrollo que se ejecutan en los países del grupo. Entre los acuerdos tomados en la VIII Cumbre de Managua aparece el de designar funcionarios de alto nivel con capacidad de toma de decisiones en cuanto al diseño y discusión de las estrategias necesarias para el desarrollo de la propuesta de la Zona Económica. Esto permitirá avances más rápido para la integración regional.

Se estableció profundizar los enlaces por vía área, marítima y de comunicación, y se suscribirá un convenio entre las aerolíneas nacionales para que exista interconexión en todo el Caribe, mientras Venezuela brindará algunos buques en aras de fortalecer ese comercio. Una decisión clave es la de identificar en cada país sus capacidades productivas y sus necesidades comerciales y la forma de complementarlas.

A la industria sin humo se le dará una atención especial debido a la relevancia que tiene en estos momentos para la adquisición de divisas por los que se implementarán políticas turísticas comunes para la región.

Lo que constituye la razón de ser de PETROCARIBE, es decir, el desarrollo socio cultural de su población se continuará impulsando con atención primordial a la educación (erradicar el analfabetismo) y a la salud, entre los que se destacan la atención primaria y la Misión Milagro.

Para la promoción del desarrollo agrícola en momentos en que los productos alimenticios se encarecen en el mercado internacional, la empresa venezolana Pequiven S.A., establecerá los términos y condiciones de suministro continuo y directo de urea, con lo que se prevé fortalecer las producciones del agro y la seguridad alimentaria. 

Lo primordial de PETROCARIBE es que sus acuerdos económicos y sociales no se quedan en los papeles sino que se ponen en marcha con prontitud. En la próxima reunión pactada para Haití dentro de tres meses, se podrán observar los nuevos avances para beneficio de los pueblos caribeños y parte de los centroamericanos. Entre desafíos y retos, PETROCARIBE resulta uno de los buques insignias de la integración regional. 


Publicado en Opciones, Ajintem, Aporrea, Rebelión, Kadadiasomosmas, Telesur




martes, 9 de julio de 2013

Las mentiras de Francia sobre el caso Evo Morales/Edward Snowden




  
Por Salim Lamrani
Opera Mundi






            Tras una orden de Washington, varios países europeos, entre ellos Francia, cerraron su espacio aéreo al avión del Presidente de Bolivia, Evo Morales, desatando una grave crisis diplomática entre Europa y América Latina.

            Al prohibir al avión presidencial de Evo Morales sobrevolar su territorio en la noche del 2 al 3 de julio de 2013, Francia desató una grave crisis internacional con Bolivia. España, Italia y Portugal también fueron culpables del mismo acto de hostilidad hacia el país suramericano. Todos, sin excepción, siguieron las órdenes de Washington, que pensaba erróneamente que su exagente Edward Snowden se encontraba a bordo del avión.
            Toda América Latina, desde Chile hasta Cuba, de todas las tendencias políticas, condenó este acto, inaudito desde el final de la Segunda Guerra Mundial. París fue culpable de una gravísima violación del Derecho Internacional al atentar contra la inmunidad diplomática absoluta de la cual goza todo jefe de Estado. Bolivia acudió inmediatamente a las instancias internacionales para denunciar esta agresión ilegal.
            Las explicaciones que proporcionó el Ministerio francés de Relaciones Exteriores son poco convincentes. El Quai d’Orsay “lamentó el contratiempo ocasionado al Presidente Morales por el retraso en la confirmación de la autorización del sobrevuelo del territorio por el avión del presidente”. Ahora bien, Bolivia pidió y consiguió la autorización de cruzar el espacio aéreo francés el 27 de junio de 2013, es decir seis días antes del incidente. Así, Francia sabía desde hacía casi una semana que el avión presidencial boliviano cruzaría el territorio nacional.
            Cuestionado al respecto, el Presidente francés François Hollande no proporcionó más esclarecimientos. “En cuanto me enteré de que era el avión del presidente boliviano, autoricé inmediatamente el sobrevuelo”. Otra vez, estas palabras son inexactas ya que se había dado la autorización de cruzar el espacio aéreo una semana antes del grave incidente que obligó a Evo Morales a aterrizar de emergencia en Austria y hacer una escala de 13 horas allí.
            En realidad, Francia mostró una embarazosa sumisión hacia Estados Unidos y se comportó no como una gran nación soberana e independiente sino como una república bananera dócil y obediente. París no vaciló un solo instante en violar el Derecho Internacional, cometer un acto sumamente hostil hacia un país aliado y poner en peligro la vida de un presidente democráticamente elegido, con el objetivo de acatar una orden de Washington. Así, el gobierno socialista francés prestó ayuda a la administración Obama en sus intentos de arrestar a Edward Snowden, quien reveló que los servicios de inteligencia estadounidenses espiaban a… Europa y Francia.


*Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de La Reunión y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula The Economic War Against Cuba. A Historical and Legal Perspective on the U.S. Blockade, New York, Monthly Review Press, 2013, con un prólogo de Wayne S. Smith y un prefacio de Paul Estrade.