viernes, 13 de abril de 2018

El impacto regional de la crisis brasileña



 Por Camilo López Burian
Doctor en ciencia política, Instituto de Ciencia Política, Facultad de Ciencias Sociales, Universidad de la República.

En los últimos tiempos, Brasil ha perdido visibilidad en el mapa internacional. La sexta economía mundial que discutía la gobernanza global, tanto a nivel económico como político, parece estar distraída del mundo y ausente, mientras en el ámbito interno se desata un episodio más de una crisis política que muestra cómo la democracia brasileña se debilita.

La política exterior brasileña, como toda política exterior, está condicionada por factores internacionales y domésticos, y el convulsionado escenario político actual la afecta sin dudas, algo que debería preocupar a toda la región. Henry Kissinger decía que “hacia donde se incline Brasil, se inclinará América Latina”. 

Desde Estados Unidos y Europa occidental, a mediados del siglo XX, el pensamiento dominante en relaciones internacionales sostenía que el sistema internacional era anárquico. Discutiendo esta idea, desde Sudamérica, algunos intelectuales propusieron y proponen pensar un sistema internacional jerárquico –no anárquico– e invitan a concebir la política exterior en clave autonómica, en cuanto condición que permite a los estados formularla e implementarla independientemente del constreñimiento impuesto por agentes más poderosos.

La autonomía como objetivo estratégico de la política exterior ha sido un elemento central y debatido en la historia política brasileña. Sus elites tomaron posiciones diferentes sobre la importancia de tener una política exterior autónoma o no, a la vez que discutieron, en varios momentos, cuáles eran los caminos o tácticas a aplicar para conseguir ese objetivo.

El proceso de integración regional que comenzó a construirse luego de la redemocratización en la región discurrió en paralelo al ascenso brasileño. El liderazgo o potencial liderazgo brasileño en la región es un asunto debatido académica y políticamente. Desde tiempos de Fernando Henrique Cardoso, el país más relevante de la región decidió redefinir los límites de su zona de influencia de forma más precisa. El ámbito sudamericano se transformó en el espacio territorial priorizado, evitando así la disputa con México.

Sobre el liderazgo brasileño existen argumentos diversos. Unos sostienen que por momentos ha logrado liderar la región, otros lo ven como un potencial líder que no logra hacerlo, algunos señalan que no “paga los costos” de su liderazgo y hay quienes lo ven como un líder que no logra tener el reconocimiento como tal de parte de sus vecinos o que se preocupa más por ser un actor global que de liderar su región. Poco importa ahora si logró o no ser líder, lo indiscutible es que es el país más importante en la región.

Su política exterior, tantas veces reconocida por su estabilidad en el tiempo, tuvo un cambio de orientación sustantiva con la llegada del Partido de los Trabajadores (PT) al gobierno y el triunfo de Luiz Inácio Lula da Silva. De 2003 a 2010, con el embajador Celso Amorim como canciller, el gobierno de Lula tuvo como objetivo una política autónoma “activa y altiva”. Con los pies en la región sudamericana y la mirada puesta en el Sur global. Brasil buscó la autonomía mediante una nueva estrategia, a la que algunos académicos llamaron “autonomía por la diversificación”.1 Guiado por la adhesión a los principios y las normas internacionales, y las alianzas Sur-Sur, incluso regionales, el objetivo fue reducir asimetrías globales y buscar el aumento de las capacidades de negociación con los países desarrollados, en el contexto de un mundo multipolar e intentando evitar la autarquía y el aislamiento, tanto de Brasil como de Sudamérica.

Los tiempos de Dilma Rousseff al frente de la presidencia de Brasil estuvieron marcados por una menor priorización de la agenda internacional. Y la asunción de Michel Temer, luego del juicio político a Dilma, conllevó un cambio radical de orientación en muchas de las políticas públicas de Brasil. La política exterior no fue excepción. Con un discurso duro contra la política exterior de los tiempos del PT, acusándola de ideologizada, el gobierno de Temer propuso su “restauración”. El norte volvería a ser el Norte, la economía, el vector central de la política y Brasil debería abandonar su pretensión de discutir la gobernanza internacional. La política exterior autonomista dejaba paso a una restauración que colocó su fundamento en la idea de “pragmatismo”, palabra que sus emisores consideran sinónimo de ausencia de ideología.

Brasil se encuentra hoy en una crisis política interna enorme que afecta su política exterior y que condiciona la de los países sudamericanos. Un presidente con una bajísima aprobación popular y con altísimo rechazo necesita mayorías para mantenerse en el marco de un sistema presidencialista de coalición y para impulsar su agenda contrarreformista (de reformas de signo contrario a las políticas propuestas por el PT a los ciudadanos). El apoyo parlamentario del presidente radica en un grupo de congresistas autodenominado “Centrão”, compuesto por una decena de partidos que comparten posiciones conservadoras y diputados que integran bancadas como la evangélica, la de los grandes empresarios, la que impulsa políticas de seguridad y la ruralista. Los intereses de estos grupos han impactado sobre políticas ambientales, laborales, la política exterior y comercial brasileña, y el posicionamiento de Brasil en foros internacionales donde otrora era reconocido por su liderazgo. Para ilustrar el asunto: en la última década Brasil era reconocido por su liderazgo internacional en la lucha contra el trabajo esclavo. El año pasado, el Ejecutivo, bajo la presión de grupos que apoyan a Temer en el parlamento, modificó controles a empresas que buscaban combatir esta práctica. La Organización Internacional del Trabajo (OIT) se manifestó en contra por considerarlo un retroceso y finalmente el gobierno de Temer tuvo que volver sobre sus pasos. Otro ejemplo puede verse en cómo los intereses de grupos económicos han afectado las relaciones económicas de Brasil con otros países.2

El gobierno de Temer implicó un cambio muy importante en la orientación de la política exterior de Brasil al eliminar la idea de una política autonómica, activa y altiva. La crisis interna tiene un impacto negativo en el estatus internacional brasileño, a la vez que el Estado no mantiene una política activa en el ámbito multilateral y ve afectada su capacidad de liderar los procesos regionales y la agenda negociadora externa mercosuriana.

Líder o no, este es un momento malo para que Brasil se proyecte en la región y a nivel global. Y esta es una mala noticia para nosotros y para nuestra región. Pero evaluar este cambio única o centralmente en clave económico-comercial es un error analítico y estratégico. El momento político pone en juego la calidad de la democracia brasileña y sus instituciones. Esperemos que los actores políticos brasileños estén a la altura de los acontecimientos para salvaguardarlas. Y esperemos que desde Uruguay discutamos este asunto preocupados por la economía, pero también por la política, las instituciones y la democracia en Brasil.
  1. Véase Tullo Vigevani y Gabriel Cepaluni (2007). “A política externa de Lula da Silva: a estratégia da autonomia pela diversificação”. Contexto Internacional, 29(2), páginas 273-335.
  2. Sobre el caso de las relaciones económicas entre Brasil y Uruguay, véase “Temer y los lobbies feroces”, Brecha, 20-X-17.

martes, 10 de abril de 2018

EE.UU.- Las prioridades de Trump


GRUPO EL HERALDO 

Dr. Néstor García Iturbe

10 de abril del 2018

Para tratar de entender en algo las acciones que el presidente Donald Trump realiza casi a diario, es importante tener una idea de cuáles son sus prioridades, pues regularmente, las acciones que un país realiza como parte de su política exterior, están vinculadas a las situaciones interna que el mismo intenta resolver.

En mi criterio, la principal prioridad de Trump radica en las elecciones que se efectuarán en noviembre del 2018.

Trump aspira a mantener la mayoría en el Senado y en la Cámara de Representantes, pero con una composición distinta a la que estos cuerpos tienen en la actualidad, con el fin de tratar de sacar de los mismos a los republicanos que no están de acuerdo con su política y que han sido los principales culpables de que varias de las legislaciones presentadas por el presidente no fueran aprobadas, o sufrieran serias modificaciones para lograr su aprobación. Trump quiere una mayoría totalmente incondicional que le permita seguir adelante con sus planes.

La tarea de Trump no es fácil, pues muchos Congresistas, de sólida base de apoyo dentro del partido, con un largo historial y prestigio, han planteado que no se presentarán en las próximas elecciones, muchos de ellos por discrepar de las ideas del presidente, por lo que Trump tendrá que encontrar alguien que aspire, pero con posibilidades de triunfo distintas a las de un político tradicional que ha estado en el Congreso durante años.  Esto fortalece las aspiraciones el partido demócrata, que tendrá un contrincante más débil en ese Estado.

De acuerdo con lo expresado, suman cuatro los Senadores republicanos que han decidido retirarse de la contienda electoral. En cuanto  los republicanos miembros de la Cámara de Representantes, la cifra es mayor, pues totalizan cerca de veinticuatro. Debe tomarse en consideración que un número de Senadores no necesitan reelegirse hasta el 2020,  así que aún pueden quedar en el Congreso  voces disidentes con Trump.

Algunos de los Congresistas que han declarado no aspirarán representan Estados importantes, por lo que sus acciones pudieran también reflejarse en las elecciones del 2020 donde Trump seguramente aspira a ser reelegido. Dentro de los Congresistas que hasta este momento han planteado no continuar en sus cargos, están: los Senadores republicanos  Bob Corker, de Tennessee y Jeff Flake de Arizona, ambos críticos de Trump, a lo que podemos agregar a Lindser Graham, cuyo cargo no se discutirá en las próximas elecciones, pero que también se ha distinguido por no coincidir con las ideas el presidente.

Entre los republicanos  miembros de la Cámara de Representantes, podemos mencionar a Ryan Costello, de Pennsylvania que atribuyó su decisión a la frustración que Trump había creado en él. Otro del mismo Estado, Charlie Dent planeó que la política de la administración era desestabilizadora. El estado de Pennsylvania es importante en las elecciones.

Siempre quedarán en el Congreso, dentro del partido republicano, voces que se opongan a las ideas de Trump, como la del representante Trey Gowdy, de Carolina del Sur, Presidente del Comité para la Supervisión y Reforma del Gobierno, cuyos comentarios hacia Trump no han sido favorables.

El Senador republicano Rand Paul de Kentucky declaró su oposición al nombramiento de Gina Haspel como Director de la Agencia Central de Inteligencia, a lo que se sumó , en este caso un demócrata, John Turner de Dakota del Sur, el que dijo la discusión de este caso llevaría mucho tiempo, en resumen, para no llegar a resultado alguno. Otro que plantea se involucrará en el asunto es el Senador republicano John McCain, de Arizona quien ha planteado preguntará a Haspel sobre su vinculación en los métodos de tortura desarrollados durante la administración Bush.

Estos ejemplos nos permiten definir que en realidad las elecciones de noviembre del 2018 tienen que ser una prioridad para Trump, sobre lo cual está trabajando, pues el está consciente del asunto y la necesidad de resolverlo para continuar son sus planes y garantizar la reelección del 2020 si todo le resulta favorable.

Trump ha logrado mantener el desempleo en el 4,1 por ciento, algo beneficioso para sus aspiraciones. Dentro de esto también ha disminuido el desempleo entre los ciudadanos de la raza negra, que de cerca del 14 por ciento, se encuentra en el 6,9  y algunos de sus planes como el relacionado con la superestructura y la continuación del muro, deben proporcionar un buen número de empleos, algunos como el muro, a latinos.

Las inversiones que algunas empresas, principalmente automovilísticas, tenían planificadas en México, debido a las tarifas que Trump anunció para los autos, se comenzaron  realizar en Estados Unidos, incluyendo una fábrica de la Toyota que fue anunciada radicaría en  Alabama, estado que no tiene tradición en la fabricación de automóviles, pero que tiene un  alto desempleo de ciudadanos de la raza negra.

Trump está asegurando un factor importante según los politólogos estadounidenses, si hay empleo, dinero y buena vida, no importa lo que sucede en el exterior.  Eso es parte de la filosofía de la mayoría del pueblo estadounidense. Siempre habrán grupos de izquierda que protesten, personas honestas que no estén de acurdo con la guerra y otros desmanes del gobierno, pero el sistema prevalece sobre ellos.

La situación de las elecciones se complica con la imposición de tarifas a China y la guerra comercial que esto ha originado.  Inicialmente la administración Trump anuncio la imposición de tarifas por 50 billones de dólares a los productos chinos y ante la respuesta China imponiendo tarifas por ese mismo importe, Estados Unidos subió la parada hasta 100 billones.

Esta situación afecta productores de frijol de soya y carne de puerco de Minnesota, Indiana, North Dakota y Missouri. También a los productores de maíz de Nebraska, Minnesota a Indiana, al igual que productores de carne de res de Nebraska, Missouri, Wisconsin, Montana, Minnesota, la Florida y los de trigo de Montana.

Los demócratas consideran que pueden aprovechar esta situación para las próximas elecciones, entre ellos se encuentran ClaireMcCaskill de Missouri, Tammy Baldwin de Wisconsin, Joe Donnelly de Indiana, John Tester de Montana, Bill Nelson de la Florida y Heidi Heirkamp de North Dakota, todos ellos aspirando en Estados que fueron ganados por Trump en las elecciones pasadas y donde el efecto de las tarifas pudiera cambiar el voto de una buena parte de la población, esto se calcula también afectaría las aspiraciones del senador republicano por Nebraska Deb Fisher.

La famosa guerra económica requiere un análisis particular, además de este  preliminar que hemos realizado, de cómo la misma puede afectar las elecciones en distintos Estados de la Unión. Trump puede estar utilizando sus habilidades como comerciante en el desarrollo de los acontecimientos, con el fin de llegar finalmente a un arreglo que resulte beneficioso para Estados Unidos, pero lo que piense hacer, debe hacerlo lo antes posible, con el fin de que este asunto influya lo menos posible en el resultado de las elecciones de noviembre.

El sabe que no está en las mejores condiciones para noviembre y que el resultado del escrutinio pudiera tener efectos negativos para sus planes futuros.


lunes, 9 de abril de 2018

EE.UU.- ¿Qué se esconde detrás de la globalización?


GRUPO EL HERALDO 


Por: Dr. Néstor García Iturbe
16 de marzo del 2018.

La palabra globalización es un instrumento del imperio para encubrir un nueva forma de expansión, en este caso económica, con la cual fortalece su hegemonía sobre otros países y el régimen de explotación que somete a los mismos, todo eso encubierto bajo un limitado beneficio que reciben estos,  con el “desarrollo” de sus economías, lo cual no deja de ser un desarrollo controlado y ajustado a los intereses económicos de los grandes capitales del imperio y las grandes potencias mundiales.

Algunos organismos internacionales, en  su definición sobre la globalización, tratan de presentarla como un fenómeno inexorable, determinado  por la historia como parte del progreso de la humanidad, tendiente a desarrollar una especie de división internacional del trabajo, que se encamina a la integración de la economía mundial, lo cual no es cierto.

El Fondo Monetario Internacional, uno de los instrumentos creados y utilizados en función de los intereses de los grandes consorcios y de los países donde estos tienen el poder en sus manos, define la globalización de la siguiente forma:

“La "globalización" económica es un proceso histórico, el resultado de la innovación humana y el progreso tecnológico. Se refiere a la creciente integración de las economías de todo el mundo, especialmente a través del comercio y los flujos financieros. En algunos casos este término hace alusión al desplazamiento de personas (mano de obra) y la transferencia de conocimientos (tecnología) a través de las fronteras internacionales. La globalización abarca además aspectos culturales, políticos y ambientales más amplios que no se analizan en esta nota.

En su aspecto más básico la globalización no encierra ningún misterio. El uso de este término se utiliza comúnmente desde los años ochenta, es decir, desde que los adelantos tecnológicos han facilitado y acelerado las transacciones internacionales comerciales y financieras. Se refiere a la prolongación más allá de las fronteras nacionales de las mismas fuerzas del mercado que durante siglos han operado a todos los niveles de la actividad económica humana: en los mercados rurales, las industrias urbanas o los centros financieros.

Los mercados promueven la eficiencia por medio de la competencia y la división del trabajo, es decir, la especialización que permite a las personas y a las economías centrarse en lo que mejor saben hacer. Gracias a la globalización, es posible beneficiarse de mercados cada vez más vastos en todo el mundo y tener mayor acceso a los flujos de capital y a la tecnología, y beneficiarse de importaciones más baratas y mercados de exportación más amplios. Pero los mercados no garantizan necesariamente que la mayor eficiencia beneficiará a todos. Los países deben estar dispuestos a adoptar las políticas necesarias y, en el caso de los países más pobres, posiblemente necesiten el respaldo de la comunidad internacional a tal efecto.”

En esta definición se trata de presentar la globalización como un fenómeno propio de las transacciones  internacionales comerciales  y financieras, como si fueran las “fuerzas del mercado” las que originaron el fenómeno, cuando el mismo  es un producto de la política hegemónica y de explotación a otros países que han desarrollado Estados Unido y otras potencias mundiales durante un proceso de inversión  indiscriminada, donde prima el interés del inversionista y no del país donde se realiza la inversión, por lo regular países pobres, que encuentran en estas nuevas fuentes de empleo, al menos un poco de oxígeno que les permite continuar respirando.

Oro medio, en este caso Wikippedia, también nos ofrece su definición del asunto, cuando plantea  “La globalización es un proceso económico, tecnológico, político, social, empresarial y cultural a escala mundial que consiste en la creciente comunicación e interdependencia entre los distintos países del mundo uniendo sus mercados, sociedades y culturas, a través de una serie de transformaciones sociales, económicas y políticas que les dan un carácter global

La globalización es a menudo identificada como un proceso dinámico producido principalmente por la sociedad, y que han abierto sus puertas a la revolución informática, llegando a un nivel considerable de liberalización y democratización en su cultura política, en su ordenamiento jurídico y económico nacional, y en sus relaciones nacionales e internacionales.”

Nuevamente se trata de presentar al monstruo como parte de un proceso de integración económica y social, a escala mundial donde se destaca la comunicación e interdependencia entre los distintos países del mundo, cuando en realidad son acciones forzadas y dirigidas por un país que se beneficiará de las mismas y otro al cual se le crea una dependencia planificada y por lo regular permanente, pues su desarrollo queda comprometido con los intereses económicos del inversionista, regularmente una de las  grandes potencias mundiales.

Una publicación especializada, “El Portal Estadístico” nos describe la globalización en una forma más comprensible y cercana a la realidad. En este caso la describe  “Como la Inversión Directa Extranjera (FDI), sencillamente el dinero que invierte una empresa en otra empresa, de un país diferente. Estas compañías usualmente poseen una parte de la compañía extranjera en la cual han invertido e influyen en el proceso de producción, la toma de decisiones y todo aquello que se relaciona con el proceso de producción, incluyendo los salarios.

Aunque el fenómeno saque en gran medida ventaja de los avances tecnológicos del siglo 21, así como también de la flexibilidad cultural de la población en edad laboral de hoy, la inversión directa extranjera tiene una larga historia, remontándose a los imperios coloniales. No sin críticos, el FDI generalmente traer ventajas para la compañía inversionista, como el acceso a los nuevos mercados además de  costos de la mano de obra, los materiales y las instalaciones de producción a un costo disminuido, acorde a la situación del país donde se realiza la inversión.. La economía local puede sacar provecho de una infusión de capital, acceso a las nuevas tecnologías, disminución del desempleo, salarios por encima de la norma nacional, pero la que recibe beneficios extraordinarios es la empresa que realiza la inversión, amparada en el proceso de globalización.”

La inversión de Estados Unidos en el extranjero ha tenido  un crecimiento vertiginoso en los decenios pasados.  Las corporaciones multinacionales estadounidenses, especialmente enfocadas en el incremento de sus beneficios financieros,  han invertido en fábricas en ultramar, que le ofrecen esas ventajas. Sin embargo, una parte grande de estas corporaciones enfocan la producción  no sólo a suministrar el mercado de Estados Unidos, sino también la demanda local de los productos que fabrican y  competir en el mercado internacional.

En el año 2016, la inversión acumulada total de Estados Unidos en otros países, representó 5, 33 trillones de dólares.

De acurdo con la información obtenida en “El Portal Estadístico” las inversiones estadounidenses en algunos países desde el año 2000 al 2016 acumulan los siguientes totales.( En Billones de dólares)

ASIA PACIFICO         846,68

AUSTRALIA               165,35

JAPON                       114,64

ALEMANIA                107,71

CHINA                          92,48

MEXICO                       87, 64  

AFRICA                        57,47

ORIENTE MEDIO        45,93

INDIA                           32,94

ITALIA                          24,69

Este ritmo de inversión estadounidense en otros países pudiera calificarse como “resultado de la globalización”, sin embargo está dirigido, en su mayoría,  hacia países donde el dólar está altamente cotizado cuando se compara con la moneda del país, lugares donde  el realizar una inversión tiene un costo muchísimo más barato que si se realizara en Estados Unidos, donde se pagarán salarios muchísimo más bajos que los que podría recibir un obrero estadounidense realizando la misma labor, donde debido a la nueva inversión regularmente el país receptor otorga varios años de exención de impuestos a la empresa inversionista y le permite extraer  una alta proporción de sus utilidades, que regularmente van a parar a los paraísos fiscales, para que el gobierno estadounidense no pueda imponerles impuestos por las mismas. En este caso estamos analizando el proceso inversionista de un país, Estados Unidos, lanzado contra los recursos del mundo para obtener las mayores ganancias posibles.

Podemos también analizar el caso de un país, receptor de inversiones foráneas, que estimula las mismas ofreciendo sus recursos naturales, su mano de obra barata, exenciones de impuesto y otra ventajas para que el capitalista encuentre el mayor beneficio posible invirtiendo en el mismo. Tomemos la República Popular China como ejemplo en este análisis.  Para este ejercicio hemos seleccionado los diez países que han realizado las mayores inversiones en el misma, lo que evidentemente ha resultado en un desarrollo de su economía debido a la Inversión Extranjera Directa, que está sujeta a problemas de los mercados, internos y externos, el adelanto tecnológico de la inversión realizada, las relaciones diplomáticas y la política comercial entre China y el país inversionista.

Estados Unidos: 92,480 millones hasta el 2016.

Anualmente se invierten cerca de 2,000 millones.  La presencia de compañías estadounidenses se extiende a casi todos los sectores manufactureros o de servicios pero, según diversos analistas de las relaciones bilaterales, la desaceleración económica china, una regulación más estricta de los mercados y un aumento de los costos laborales han llevado a un repliegue de la inversión estadounidense en los últimos años.

 

Corea del Sur, cerca de 3,000 millones anuales. 

 Sus inversiones se concentran en los sectores automotriz e informático-

Singapur: 12,000 millones hasta el 2016.


Anualmente realiza inversiones  cercanas a los 2,500 millones  de dólares. China es su principal destino de inversiones en Asia. Tiene presencia en las empresas Pvilion Energy Pte, dedicada a los problemas energéticos y Jurong Consultants.


Taiwán: Invierte cerca de 2,500 millones anuales.

A pesar de las diferencias políticas, está entre los primeros inversores en China.   Sus inversiones están presentes en el campo de la minería, el sector electrónico y los textiles.  Sus empresas de más peso son la Foxconn y Want Want China Holding ltd. 

Alemania: 

Se registra una inversión promedio de 2,000 millones de dólares anuales

La inversión germana en China, que dio un salto entre 2009 y 2013, la cual s ha dirigido  la industria automotriz, teniendo presencia de  Audi, BMW, Mercedes and Jaguar Land Rover. La  inversión directa alemana también se ha concentrado en la  manufactura  de maquinaria y equipamiento, en particular el sector de alta tecnología.

 

Reino Unido: Inversiones por aproximadamente 800 millones anuales. 

La inversión directa br4itánica se ha centrado principalmente ene le sector farmacéutico

 

Francia: Inversiones cerca de los 500 millones de dólares anuales 

Concentrada en el sector manufacturero, productos químicos, automotriz, alimentos, maquinaria y en el energético. La Renault tiene fuerte presencia en el país. Además de la Electricite de France, Suez, Telecom, Total Oil, Carrefour, Danone y Loreal.Hong Kong


Hong Kong:

Esta ciudad ha sido el puente de entrada de la mayor cantidad e inversiones en China, en algunos casos para empresas y capitales que no desean aparecer directamente como inversionistas. Se crea una empresa en Hong Kong, algo relativamente fácil y por medio de la misma se invierte en China.  Por esta vía pudiera llegar dinero proveniente de las drogas y otras actividades criminales.

Se han registrado cuantiosas inversiones como las de los primeros mese del2016 ascendente a 33,000 millones de dólares, estas se registraron principalmente en los sectores electrónico y textil. 

Japón:

El proceso inversionista japonés presenta algunas dificultades y ha disminuido, primero por la disputa sobre las islas Senkaku. Adicionalmente el costo manufacturero chino ha aumentado, por lo que muchas de las inversiones japonesas se han desviado hacia Vietnam, Cambodia, Indonesia y Filipinas.El sector automotriz, junto al electrónico, han sido los más importantes ejes de la inversión nipona en China.


 Holanda:

Operan en China cerca de 600 empresas holandesas.  En su mayoría son pequeñas y medianas que no tiene más de 50 empleados. La presencia holandesa eta presente en el  sector de la agroindustria hasta servicios. Un buen número se dedican al comercio electrónico.

Después de analizar las dos situaciones presentadas, las inversiones de Estados Unidos en el Exterior y el proceso inversionista que durante años se ha desarrollado en China, no podemos pensar en una “división internacional del trabajo”, tampoco en el desarrollo normal de un país, en mi criterio ambos procesos están impulsados por el afán de lucro, la explotación de la mano de obra barata donde esta se presente y en casos como el de China, sujeto a  que otros países no ofrezcan mejores ventajas a los  inversionistas, incluyendo la propia mano de obra, como ha sucedido en el caso de Japón y el desvío de sus inversiones.

Un país con pocos recursos económicos requiere de la inversión extranjera para su desarrollo económico, nadie lo duda, sin embargo el proceso inversionista puede crear dependencias y vulnerabilidades, económicas y políticas, que deben medirse adecuadamente y estar preparados para ellas.

Algunos teóricos de la globalización la presentan como un proceso, además de económico y tecnológico, (que se relaciona directamente con el proceso inversionista) como político, social y cultural, lo cual adicionan para mostrar como el proceso se humaniza, ya que no solamente se dedica a la explotación de los países de poco desarrollo por parte de las potencias mundiales, sino que además se preocupa por el aspecto social y cultural de los desposeídos.

La globalización, si fuera un fenómeno para beneficiar a la población mundial y no solamente a una pequeña parte de esta, los inversionistas, tendría que agregar en sus propósitos la utilización de las ganancias para resolver los problemas de hambruna, la carencia de atención médica, los problemas de la educación que se ponen de manifiesto, principalmente en los países situados en el  Sur del globo terráqueo.

Al hablar de la globalización no se hace referencia la globalización militar, algo que ya existe y que pone en peligro la paz mundial. En el caso de Estados Unidos, que se auto otorgó el papel de gendarme mundial, para defender los intereses económicos de su clase dominante, tiene perfectamente organizada la globalización militar, por medio de los Comandos establecidos, los cuales cubren totalmente el globo terrestre.  Pudiéramos decir que esa es una perfecta globalización.Mientras que los inversionistas y hombres de negocio estadounidenses van colocando su dinero en distintos países, como parte del proceso de “globalización” también los “inversionistas” del Pentágono se preocupan por fortalecer los medios con que cuentan para la defensa de la “Seguridad Nacional”, representada en este caso por las inversiones antes mencionadas. Donde puede abrirse o fortalecer una base militar, esto se realiza, cuando esto no es posible, se cuidan los intereses económicos distribuyendo cohetería atómica en las fronteras del país donde está situada las inversiones.

Recientemente varios medios de prensa han hecho referencia a la “guerra comercial” como algo que puede iniciarse debido a las medidas proteccionistas que el gobierno de Estados Unidos está planteando tomar en relación con algunas de sus importaciones. La “guerra comercial” no h a dejado de existir, en algunos momentos se ha manifestado con pequeñas escaramuzas y en otros como, puede suceder ahora, en cruentos combates.

La “guerra comercial” se ha sostenido por el afán de lucro de las grandes potencias y los intereses particulares de los inversionistas. Si en definitiva, se llega a combatir seriamente, tendremos que ver quienes tienen mejores armas y más resistencia, si los inversionistas y los países donde tiene sus inversiones, o los que promulgan el proteccionismo.

BIBLIOGRAFIA

BBC.MUNDO.- Los Diez países que invierten más dinero en China

Departamento de Defensa de Estados Unidos.- Comando Unificados

El Portal Estadístico.- Inversiones de Estados Unidos en otros países.

Fondo Monetario Internacional.- Informe 2015.

Wikippedia.- ¿Qué es la Globalización”