“Espero que en
los Foros Paralelos de Panamá se discutan los problemas reales de los pueblos
de nuestro hemisferio y se busque la vía para que las propuestas que se
enuncien allí sean tomadas en cuenta por los Gobiernos y los Estados de la región.
A diferencia de los foros oficiales, que muchas veces son formales y tienen
poco espacio para la discusión abierta, estos foros paralelos estarán
representados por las fuerzas vivas de la sociedad civil y los actores sociales
de nuestras regiones, quienes sí pueden actuar a nivel de comunidad y local
para llevar a la práctica estos proyectos.
“La misión que tiene la sociedad civil cubana en estos
foros paralelos es que estas discusiones se interconecten directamente con los
debates de los Jefes de Estado y de Gobierno que participarán en la VII Cumbre
de las Américas. El éxito depende de la voluntad política de estos últimos de
escuchar esas recomendaciones y propuestas que también son esenciales para la
vida y el futuro de los ciudadanos de nuestra región.
“En cuanto al panel de Seguridad y Migración que tuvo
lugar hoyen la Casa del Alba Cultural, me pareció completo. Tuvo un enfoque
multifactorial y multidimensional sobre estos temas.
Normalmente las grandes potencias desarrollan un
enfoque centralizado, unidireccional, rígido, sin ir a las causas de los
problemas, y solo atacan sus manifestaciones y consecuencias.
“Desde la Sociedad Civil cubana el enfoque es
diferente. Se ha analizado el tema desde un punto de vista económico, social y
cultural, científico, pedagógico y no desde la arista estrecha de lo militar
aunque lo militar fue analizado profundamente porque es en este aspecto donde
radican las principales políticas de los Estados Unidos para intervenir en la
región.
“Si vamos a hablar del narcotráfico o la droga,
Estados Unidos y otros países de la región tratan de resolver el tema por la
vía militar o policial; si hablamos de migraciones, igual se aplica la
militarización de la frontera, la intervención militar. Prevalece un énfasis en
la aplicación de políticas militaristas. Si se van a enfrentar otros problemas
sociales o de recursos naturales se implantan bases militares. Si se quieren
controlar a determinados sectores sociales, se utiliza el ciberespacio desde
una perspectiva militar.
“Entonces, nuestro panel ha realizado un abordaje del
tema desde las causas, fomentando una cultura de paz de los ciudadanos desde la
niñez para reducir todo tipo de violencia, no solo el conflicto militar, sino
también todo tipo de violencia: la violencia de género, la que tiene lugar
entre grupos religiosos, y siempre sobre la base del respeto a las tradiciones,
la cultura, los sistemas políticos y judiciales de cada país, que son soberanos
en aplicar estas políticas o las leyes al interior de sus naciones.
“Pero en realidad hay dos aspectos que son muy
urgentes: enfrentar la eliminación de las armas nucleares y el cambio climático
global, siempre desde una cultura de paz. (Pensando Américas)
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